Cuando apenas un mes después de que se habilitara la libre dispensación de test de autodiagnóstico de COVID-19 en farmacias la ministra de Sanidad, Carolina Darias calificó la medida como “tremendamente positiva”, quizá lo hacía siendo conocedora de los primeros balances y números que manejan las CC.AA (como gestoras principales de los datos). Unas sensaciones especialmente positivas no solo por la ausencia de problemas derivados de este libre acceso a las pruebas, sino por la cantidad de positivos que se han podido detectar y comunicar desde las propias oficinas de farmacia cuando supervisan o realizan estas pruebas a los usuarios.
Como ha venido contando EG, hasta ocho comunidades autónomas —Aragón, Canarias, Cantabria, Cataluña, Galicia, La Rioja, Murcia y Navarra— tienen implantados circuitos de comunicación entre sus administraciones sanitarias y red de oficinas de farmacia para la notificación de resultados positivos de autotest de COVID-19.
Diferencias entre acuerdos
Los acuerdos suscritos con los colegios farmacéuticos varían en su contenido y en las funciones atribuidas a los farmacéuticos y farmacias, pero coinciden en su objetivo: asegurar la trazabilidad de los resultados, contribuyendo a frenar la propagación de la enfermedad. Incluso en algún caso, la información recabada y transmitida por la farmacia, se consigna en la Historia Clínica del paciente.
Y en algunos protocolos, como el que rige en Cantabria, el mero registro de un positivo por la farmacia en la aplicación informática habilitada con el Servicio Cántabro de Salud genera automáticamente una cita para una PCR comprobatoria al usuario. El objetivo, así, es cortar con la mayor inmediatez posible las cadenas de transmisión.
EG ha recabado la información sobre estos registros que manejan las Administraciones y colegios farmacéuticos en estas regiones. Y los resultados no pueden ser, valga la redundancia, más positivos. Tanto por la propia cifra de contagios detectados en las oficinas de farmacia como por el porcentaje que suponen dentro del total de casos que registran estas regiones en el conjunto de estructuras sanitarias: centros de salud, hospitales, etc.
A continuación, se repasan algunos de los datos remitidos a EG por Consejerías y/o COF.
Cantabria
Desde el pasado 22 de julio se han notificado 1.979 positivos de COVID-19, con el mayor pico diario registrado el pasado 4 de agosto, cuando se notificaron 82 positivos en una misma jornada.
En una entrevista que se recoge en esta misma edición de EG, el consejero de Sanidad cántabro, Miguel Rodríguez, bendice el apoyo ofrecido por la red de boticas, al considerar “fundamental” la comunicación de positivos al sistema sanitario.
Murcia
En la Región de Murcia, a fecha de 7 de septiembre, las farmacias han supervisado 2.057 test de autodiagnóstico de la COVID-19 e informado de 47 casos positivos al Servicio Murciano de Salud. Esa es la misma cifra (2.057) de certificados de COVID-19 que han emitido las farmacias murcianas.
La presidenta del COF de Murcia, Paula Payá, ha agradecido a los farmacéuticos su “implicación y enorme contribución para frenar los contagios”. “En la Región de Murcia hemos sido pioneros dando un paso más en la dispensación de test atendiendo las necesidades de los ciudadanos y colaborando con Salud en el control de los casos sospechosos de ser positivos”, subraya.
Navarra
En determinadas semanas, las farmacias navarras han notificado cerca del 10 por ciento de positivos registrados en toda la región. De los 612 casos contabilizados entre los días 23 y 29 de agosto, 56 han sido detectados a través de los test de autodiagnóstico de antígenos de venta en boticas.
Anteriormente, de los 573 casos contabilizados en la región entre los días 30 de agosto y 5 de septiembre, 34 han sido detectados a través de estos test, lo cual equivale a un 6 por ciento de los casos.
Cataluña
Con el cierre de agosto, las farmacias de Cataluña habían supervisado más de 52.600 test de antígenos de autodiagnóstico en el cómputo que engloba la venta libre de estas pruebas —habilitada el pasado 22 de julio— y otra serie de iniciativas de salud pública en la que participan estos establecimientos. Es el caso, por ejemplo, de un programa de cribado dirigido a monitores y niños y jóvenes participantes a partir de los 10 años de forma previa a su incorporación a actividades de ocio en esta región —casales, colonias, campamentos, rutas— y por el cual pueden acudir a una botica a realizarse un test de forma gratuita.
La supervisión de las boticas catalanas ha permitido detectar y registrar, en el cómputo global, 648 positivos
Madrid
En la Comunidad de Madrid, aunque no existe un protocolo para la comunicación de resultados desde las farmacias, el Servicio Madrileño de Salud había confirmado 3.787 positivos registrados en los test de autodiagnóstico dispensados en farmacias (a 29 de agosto).
