El Congreso de los Diputados ha rechazado la regulación integral del cannabis para su uso terapéutico y recreativo con los votos en contra del PSOE, PP, Vox y Foro. La iniciativa, una proposición de ley presentada por ERC, ha reunido el apoyo de Unidas Podemos, PNV y Cs, entre otras fuerzas parlamentarias. Se trata de la segunda vez que la Cámara Baja tumba esta ley durante la actual legislatura. La anterior votación, a propuesta de Más País, concitó el rechazo de los mismo grupos.
El objetivo de la norma, tal y como ha defendido la diputada republicana Marta Rosique, es regular el cannabis, porque “negarlo o prohibirlo no hará que el consumo desaparezca”. Para Rosique esta es una cuestión de salud pública al considerar al cannabis como un medicamento y así facilitar su acceso a la ciudadanía que necesita a esta sustancia como terapia medicinal a través de una receta médica. “En la situación actual se recurre a vías ilegales para tratarse”, argumenta. Dicha ley preveía la regulación también de uso recreativo, además del cultivo, transporte, tenencia, consumo, dispensación y comercialización.
Según ha explicado la diputada de ERC hay que “despenalizar el cannabis como han hecho distintos estados europeos”, con la intención además de “poner el foco en la prevención y el tratamiento de las adicciones”. El acceso al mismo sería por vía del autocultivo individual o comunal vía asociaciones sin ánimo de lucro. Se estima que más de 200.000 personas podrían beneficiarse de la legalización con fines medicinales en España, según el Observatorio Español de Cannabis Medicinal.
El PSOE, a través de Alfredo Sancho, se ha mostrado reacio a mezclar la regulación terapéutica y recreativa. “Siempre hemos defendido que son dos debates distintos, uno ayuda a la calidad de vida de miles de pacientes que sufren dolor y el otro no”, ha subrayado el diputado socialista. Desde el PP, Eduardo Carazo ha insistido en el no a un consumo que “repercute negativamente a en la salud“. Una posición compartida por Vox que, a través de Juan Luis Steegmann, ha incidido en los “daños mentales y físicos” asociados al consumo de cannabis. Por su parte los partidos que sí han apoyado la proposición de ley aducen que la prohibición es ineficaz y que otras iniciativas similares en comunidades autónomas como Navarra o Cataluña sí han tenido un respaldo mayoritario en sus Asambleas regionales.
Otras iniciativas
Esta es la tercera proposición de ley en el Congreso en los últimos dos años que busca regular el uso de esta sustancia, aunque la presentada por Unidas Podemos aún no derivado en debate parlamentario. Hace apenas unas semanas Ciudadanos registró una proposición no de ley para instar cambios normativos que establezcan una “regulación garantista” que facilite el acceso al cannabis medicinal y a información veraz sobre sus propiedades terapéuticas por parte de facultativos, empresas, pacientes e instituciones.
Además, el año pasado la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados dio luz verde al dictamen de la subcomisión que estudiada la regulación del cannabis para uso medicinal. El texto salió adelante con el apoyo del PSOE, Unidas Podemos, Ciudadanos, PNV, y PDeCAT, con los votos en contra del grupo Popular y Vox. A pesar de esta aprobación, la solicitud para que el dictamen fuera debatido en el Pleno de la Cámara quedó rechazada y sin avances concretos.
