La integración de las farmacias en redes neuronales y la derivación de pacientes entre ellas a fin de ayudarles a encontrar su medicación puede llegar a suponer incrementos medio de facturación de 400 euros al mes, según las estimaciones realizadas por Luda Partners, compañía dedicada a la digitalización de este sector.
Según se concreta, la red de colaboración entre farmacias no sólo implica derivar a los pacientes, sino también recibirlos: es una vía que funciona en ambos sentidos. “Compartir disponibilidad de productos y derivar a un paciente en caso de no disponer de un medicamento determinado significa que en algún momento, alguna otra farmacia derivará pacientes a esta. En ningún caso se produce una pérdida de paciente, sino todo lo contrario”, apuntan desde Luda Partners.
Al conseguir su medicamento cuando lo necesita, el paciente puede seguir con la pauta de su tratamiento sin ninguna interrupción, lo que repercute directamente en su calidad de vida. La derivación no sólo consiste en obtener ventajas para el sector, sino también en velar por los pacientes y su salud. Con esto, se da solución a un problema actual, como el desabastecimiento de medicamentos, que se ve paliado hasta en un 95 por ciento, evitando el peregrinaje del paciente de farmacia en farmacia, según las estimaciones de esta compañía.
Asimismo, “cuando una farmacia ayuda a un paciente a localizar un producto que necesita, ya sea un medicamento, un suplemento, etc., aunque sea en otra farmacia, logra ganar su confianza, pues ha sido capaz de encontrar una solución eficiente a una verdadera problemática de salud”, recuerdan.
“La digitalización farmacéutica es la apuesta por una mayor dedicación al paciente, de la misma manera que la farmacia colaborativa y la derivación de pacientes es una realidad para dar respuesta a estas necesidades reales de éstos y del sector farmacéutico”, explica Marcos Alves, Chief Growth Officer de LUDA Partners.
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