El gobierno del Principado de Asturias apuesta por la continuidad de la Comisión de Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios como herramienta para impulsar, desde el consenso de gestores y profesionales farmacéuticos y médicos, la prestación farmacéutica con criterios de evidencia. Así lo ha asegurado el consejero de Salud, Pablo Fernández, durante su primera comparecencia ante la Comisión de Salud de la Junta General del Principado de Asturias, donde ha asegurado que el desarrollo del Uso Racional de los Medicamentos es “una de las cuestiones que más preocupan” al nuevo equipo de la Consejería.
De hecho, articular políticas de incorporación y buen uso de medicamentos, productos y tecnologías sanitarias es uno de los principales objetivos del Plan de Salud del Principado de Asturias 2019-2030, que aparece articulado a través de seis acciones.
Seis acciones en política farmacéutica
Potenciar el papel de la Comisión del Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios en el posicionamiento terapéutico de nuevos medicamentos en la Guía Farmacoterapéutica de los Centros Sanitarios dependientes del SESPA y haciendo vinculantes sus dictámenes es precisamente el eje principal de la primera acción, relativa al impulso de los procedimientos para el posicionamiento terapéutico y el acceso en equidad de nuevos medicamentos.
La segunda acción es la mejora del acceso a indicadores e información relacionada con la prescripción, tanto en Atención Primaria como Hospitalaria, un punto que pasa, según el plan, por desarrollar y mejorar la implantación de “REBOTICA” como herramienta para conocer indicadores cuantitativos y cualitativos de prescripción, identificación de pacientes polimedicados/as y ayuda a la revisión de su historia farmacoterapéutica.
El desarrollo de estrategias para la prescripción segura y de calidad es la tercera acción. Para conseguirla, la Consejería incorporará estrategias orientadas a la prescripción de calidad, que incluyan vías formativas para profesionales, mejora del acceso a la información, boletines farmacoterapéuticos, protocolos y sistemas apoyo para el uso seguro del medicamento y deprescripción, junto con proyectos de coordinación entre los diferentes ámbitos asistenciales, que incluyan la receta electrónica. Asimismo, incorporará la recomendación de activos para la salud en el marco de la entrevista clínica y el proceso terapéutico.
Para generar sinergias entre profesionales asistenciales y servicios de farmacia del sistema sanitario, la cuarta acción, se reforzarán los servicios de farmacia de Área, tanto de Atención Primaria como de Atención Hospitalaria, para potenciar sus funciones de apoyo a las/los profesionales en las estrategias de seguridad y calidad de la prescripción.
La quinta acción, relativa a la compra centralizada y financiación de medicamentos y productos sanitarios, implicará la participación en la ejecución del Plan de Contratación de los Servicios Centrales del SESPA en el ámbito del medicamento, mediante la transparencia y la publicidad del mismo, en busca del fomento de la competencia, la eficacia y la eficiencia en la programación de los recursos fijando un precio común y unificando las características técnicas mínimas exigibles y las condiciones del suministro del medicamento objeto de contratación para todas las Áreas Sanitarias dependientes del Servicio de Salud del Principado de Asturias.
Finalmente, el Plan apuesta por promover la evaluación de tecnologías sanitarias para definir su balance riesgo‐beneficio y su posicionamiento en el sistema sanitario, una acción que se concretará potenciando el papel de la Comisión de Evaluación de Tecnologías Sanitarias para apoyar la toma de decisiones de la Administración sanitaria sobre la introducción, modificación o exclusión de las tecnologías sanitarias, entendidas como técnicas, equipos, procedimientos, métodos y sistemas organizativos orientados a promover la salud, prevenir, diagnosticar, tratar o aliviar la enfermedad, cuidar, o rehabilitar a los enfermos.
Otros ejes de gobierno
El plan de salud 2019-2030, aprobado en Consejo de Gobierno, culminará su tramitación en el Parlamento asturiano, con acciones que, según ha detallado el consejero, abordarán el problema del suicido, la cardiopatía isquémica, la ley de muerte digna, la violencia de género, las enfermedades crónicas complejas o la “desmedicalización” y el uso adecuado de los recursos sanitarios. Según los datos incluidos en el Plan, todas las mujeres mayores de 80 años toman un medicamento psicotrópico, y más del 50 por ciento de los hombres. “Se está medicalizando a la mujer y a la vejez, esto último está muy asumido por parte del sistema sanitario, no soluciona el problema y genera coste”, asegura el documento.
La intención de la Consejería pasa, entre otras cosas, por apostar por el autocuidado, la prevención y la promoción de la salud, algo que también quiere aplicar en el marco del que constituye su gran reto a nivel macro. En Asturias, el envejecimiento se sitúa 5 puntos por encima de la media nacional. “El efecto es inmediato”, ha asegurado el consejero, que tiene marcada la atención al envejecimiento y a la cronicidad como dos de los grandes desafíos de su departamento. Construir un marco para abordarlos implica, según sus palabras, “construir con precisión una estrategia de Atención Primaria que incorpore programas de Salud Pública y Salud Ambiental, así como estrategias de promoción de la salud y fomento del autocuidado y la autonomía de las personas.
