“Este pequeño píxel azul pálido que gira alrededor de una pequeña estrella en todo el universo (la Tierra) es la única casa que tiene nuestra generación y, posiblemente, las futuras, y tenemos que cuidarlo”. Con esta afirmación Raúl Falcón, subdirector de Gestión de Sostenibilidad y Transición Ecológica del Servicio Canario de Salud (SCS), agradeció el galardón que los Premios Fundamed & Wecare-u 2022 le habían hecho entrega durante la gala, de la mano de Esther Carmona, senadora y portavoz socialista de Sanidad en la Cámara Alta.
El SCS fue merecedor de este reconocimiento, perteneciente a la categoría ‘Mejor Iniciativa Sanitaria’, gracias al proyecto ‘Estrategia Salud Zer0 emisiones netas 2030’ con el que este Servicio pretende ser más sostenible, puesto que son defensores de que la salud y el medioambiente están estrechamente relacionados, hasta el punto de que, sin uno, no puede existir el otro. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo confirma: más de 5 millones de muertes al año se asocian a cambios anormales en las temperaturas.
Según detalló Falcón, el 4,4 por ciento de las emisiones mundiales de CO2 provienen de actividades relacionadas con el ámbito sanitario. “Es decir -ha proseguido-, nosotros mismos estamos provocando esos efectos que luego nos retornan”.
En la actualidad (y ya desde hace varios años), la humanidad se enfrenta al reto del cambio climático, el cual requiere de múltiples actuaciones locales para alcanzar un único resultado global. En este sentido, la OMS recuerda que la reducción de las emisiones dentro de los propios territorios es fundamental para mejorar la salud de sus poblaciones.
El 4,4% de las emisiones mundiales de CO2 provienen de actividades relacionadas con el ámbito sanitario
Es por esta razón por la que el SCS ha querido ser un ejemplo de sostenibilidad y lo ha hecho marcándose un objetivo: “reducir las emisiones generadas directa e indirectamente, dentro de toda la cadena de valor del propio servicio, alcanzando un sistema neutro de emisiones de gases de efecto invernadero para el año 2030”.
“Los sistemas públicos de salud, en sus funciones de promoción, prevención y protección de la Salud, han de ser un ejemplo de sostenibilidad”, opinó Falcón. Sin embargo, aseguró que, “desgraciadamente, la realidad es bien distinta” puesto que, “si el sector salud fuese un país, sería el sexto emisor más grande del planeta”.
Para alcanzar este objetivo, la estrategia propone una nueva metodología de gestión pública integral para la mitigación de los efectos del cambio climático, activando una propuesta innovadora, que atañe a todo el sistema público de salud, liderada y coordinada desde su gerencia. Esto implica, entre otros ejes de la iniciativa, una apuesta por la sensibilización, formación y por las renovables, así como una modernización tecnológica, el apoyo a la I+D+i y la generación de un nuevo tejido empresarial.
Acciones realizadas
Dada la exigencia de los plazos previstos por el SCS, muy inferiores a los previstos por la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que establece el límite para que España alcance la neutralidad en emisiones de CO2 en el año 2050, ya se ha iniciado la ejecución de una buena parte de las acciones previstas por la Estrategia, empezando por la medición de la huella de carbono.
Ya se ha iniciado la ejecución de una buena parte de las acciones previstas por la Estrategia
A medida que los cálculos de la huella de carbono vayan cuantificando, el SCS aseguró que los procesos o acciones que directa o indirectamente más afectan a las emisiones se irán sumando acciones concretas a la estrategia, las cuales, una vez ejecutadas, deberán nuevamente cuantificarse para una mejora continua.
“De esta forma, poco a poco, podremos ir demostrando que es posible hacerlo en todo el planeta. Porque, si no lo hacemos los servicios de salud, ¿quién lo va a hacer?“, concluyó Raúl Falcón.