El próximo 1 de septiembre tendrá lugar la actualización del listado de precios menores
| 2011-07-01T19:39:00+02:00 h |

f. Rosa / R. Chiva

Madrid

La Comisión Permanente de Farmacia acordó en la reunión del Consejo Interterritorial del pasado 21 de junio la actualización de la información de los precios menores de los medicamentos. Así, desde ese momento y hasta el 11 de julio, las compañías farmacéuticas pueden solicitar a la Administración la bajada voluntaria de precios con modificación de código nacional. La actualización se hará efectiva el próximo 1 de septiembre, aunque la información será publicada con un mes de antelación en la web del Ministerio de Sanidad, Política social e Igualdad.

Este anuncio ha cogido por sorpresa a algunos, ha molestado a otros e incluso hay quien se lo ha tomado con resignación dentro del sector farmacéutico. Lo que no ha hecho esta actualización de precios menores es dejar indiferente a ninguno de los actores implicados, que no son pocos. La patronal de los genéricos, los fabricantes de EFG, los colegios de farmacéuticos y el sector de la distribución verán mermados sus ingresos de nuevo y sus reacciones no se han hecho esperar.

Quizá por nivel de afectación, la primera en poner el grito en el cielo ha sido la Asociación Española de Genéricos (Aeseg), que a través de su director general, Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, precisó que “la actualización de precios menores va vinculada a un cambio de código nacional, lo cual dificulta mucho las cosas desde un punto de vista industrial, ya que dicha modificación lleva consigo unos costes añadidos”.

Los costes adicionales

Los costes adicionales de los que habla el responsable de Aeseg están relacionados con el cambio de código nacional, en tanto que de éste se desprende la obligación de rehacer los envases con la inscripción del nuevo código, lo que implica retirar los envases con código antiguo de las farmacias. Y este sobrecoste recae directamente sobre el fabricante.

Rodríguez de la Cuerda cree que el sector del genérico presenta ya unos precios muy bajos y los fabricantes poseen un margen bastante reducido, por lo que “cualquier coste adicional supone un serio perjuicio”. Por ello, llamó a las autoridades sanitarias a cambiar de perspectiva a la hora de acometer la actualización de precios. “Sería deseable que la actualización no fuese acompañada del cambio de código”, sugirió.

De esto mismo se quejaron en Kern Pharma, de un cambio de código nacional que implica costes añadidos y que, en general, no le compensa a la compañía. Según señaló Josep Maria Piqueras, director general de la compañía, “Sólo en muy pocos casos puede llegar a salir a cuenta asumir estos costes de adaptación sumado a una cierta bajada del precio”, reconoció. Al mismo tiempo añadió que ellos sólo adaptan sus precios a las condiciones de mercado una vez al año, que coincide con la orden de precios de referencia.

Además, Piqueras no disimuló su sorpresa ante este anuncio, ya que, según afirmó, “desde el ministerio siempre se nos había dicho que este año no se iban a tomar nuevas medidas de recorte de precios”. Dijo, además, que no tiene sentido utilizar estas herramientas ahora y consideró que esto solamente es “una forma de presionar de nuevo los precios a la baja”.

Impacto en las boticas

Otra cuestión importante es saber cómo afectará una nueva bajada de precios de los fármacos a las boticas. Cecilio Venegas, presidente de los farmacéuticos extremeños, entiende que la temporalización debería ser anual pero también hizo un llamamiento a la realidad, ya que afirmó que si la situación continúa así “se va a ver la viabilidad económica comprometida”.

Y es que, según Venegas, “lo que no se puede hacer es actuar solo y exclusivamente y a la vez con setenta actores sobre el precio del medicamento”, en alusión a los RDL 4/2010 y 8/2010, a la priorización por principio activo, a las subastas en algunas comunidades autónomas o a la eliminación de medicamentos de los sistemas de gestión, medidas que, sumadas todas ellas, cree que “abocan a un escenario de desastre”. Por su parte, Manuel Pérez, presidente del COF de Sevilla, de acuerdo con Venegas, abogó por la suspensión de los nuevos listados de precios dada la situación de crisis actual, “igual que se implantaron otras medidas económicas cuando el crecimiento era elevado”.

De la misma manera, la actualización de los precios menores impactará en los ingresos del sector de la distribución, en tanto que tendrían que negociar su retribución a la baja. Miguel Valdés, director general de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (Fedifar), encajó con naturalidad los recortes, aunque sí pidió a las autoridades un poco de previsión. “Sólo pedimos que nos den a conocer la lista con antelación suficiente para que distribución y oficina de farmacia podamos adaptar las existencias”, declaró.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad, a través de la dirección general de Farmacia, ha reconocido que no se ha realizado una estimación previa sobre los ahorros de la medida ni sobre los costes que podría suponer para el sector esta medida.