GM / EG Madrid | jueves, 07 de marzo de 2019 h |

Jesús María Fernández eligió las cabeceras de la editora Wecare-u para analizar una legislatura convulsa desde sus inicios. Hoy les ofrecemos un extracto de la entrevista que se publicará el 8 de marzo en nuestras cabeceras.

Pregunta. Existe la sensación de que se han aprobado muchas iniciativas pero que a la hora de la verdad no se han visto reflejadas en acciones del Poder Ejecutivo. ¿Qué balance hace de la legislatura?

Respuesta. Yo no tengo esa sensación. Se han aprobado 115 proposiciones no de ley en el conjunto de la Comisión. Digamos que de Sanidad hayan podido ser la mitad y tengo que decir que muchas de ellas ya están llevadas a norma o en vías de solución. Hemos discutido sobre temas como la universalización, que ya está en una ley. Hemos discutido el modelo de copago y los presupuestos de este año ya llevaban la reforma de eliminación progresiva del copago que no lleva a la situación anterior al 2012 sino que lleva a una situación de análisis por renta. Cuando Igea (el portavoz de Ciudadanos) se nos ponía en frente yo le dije que había defendido siempre un copago por renta, no sólo para pensionistas. Es verdad que no se ha cumplido porque los presupuestos se rechazaron pero el modelo ya está hecho. También está el tema de la prescripción de enfermería, se ha ampliado la cartera de servicios en temas como los dispositivos de medición de la glucosa o la micropigmentación de aureolas. También se ha eliminado el VIH u otras enfermedades como barreras de acceso al empleo público. También se ha trabajado en un plan de erradicación de hepatitis C con una propuesta de cribado y que el Ministerio lo está trabajando. Yo creo que ha habido gran sintonía entre Congreso y Gobierno.

Pregunta. Pero se quedó pendiente la financiación suficiente de la sanidad.

Respuesta. Efectivamente, pero está parada desde 2017, cuando en la Conferencia de Presidentes se trabajó en un informe que tardó un año y que debería haber iniciado un debate político.

Pregunta. ¿Qué le pareció a usted ese informe?

Respuesta. Con algunos puntos no estaba de acuerdo pero el grueso del informe era bueno. Hay que ir a la simplificación, hacia una fórmula de población ajustada para el reparto de la financiación sanitaria. El informe podría haber continuado con un estudio técnico más concreto sobre cuál sería el mejor mecanismo de asignación de la financiación sanitaria de acuerdo a la población ajustada. El problema es que no se puede solamente comparar el gasto per cápita y decir que País Vasco dedica más que Andalucía porque las comunidades autónomas no tienen nada que ver las unas con las otras. Hay comunidades autónomas donde hay un 40 por ciento de cobertura privada y otros tienen un 10 por ciento. Hay poblaciones sumamente concentradas como País Vasco y otras como Castilla y León o Aragón donde hay cupos de 300 cartillas. También es verdad que es más costoso dar atención sanitaria completa a una población de 500.000 como La Rioja o Navarra que a una población de 8 millones de habitantes. Hay muchas variables que hay que tener en cuenta. Es verdad que no es todo lo equitativa que debiera la financiación sanitaria pero no se puede simplificar el debate a la renta per cápita.

Pregunta. ¿Es más difícil llegar a acuerdos generales como este cuando aumenta la pluralidad política?

Respuesta. No lo sé. Lo cierto es que nunca hemos abordado un debate sobre financiación con fuerzas que no fueran las tradicionales. Al final los interlocutores válidos serán los presidentes autonómicos… Habrá que esperar a ver lo que ocurre en mayo.