El Global Madrid | viernes, 15 de marzo de 2019 h |

Aunque la petición de una prórroga del Parlamento británico de cara al Brexit ofrece un margen para establecer una salida ‘amistosa’, el ambiente de incertidumbre que genera la futura salida supone todo un quebradero de cabeza para la industria farmacéutica. Precisamente este asunto fue abordado en el 39 Symposiun de la Asociación Española de Farmacéuticos de la Industria (AEFI). Aquí, Paula Balaguer, responsable en GSK de Asuntos Regulatorios, puso sobre la mesa los retos a los que se enfrenta la industria.

En lo referente a la fabricación y el suministro, la industria pide que se establezcan acuerdos de reconocimiento mutuo entre ambas partes que eviten la duplicidad de procesos y procedimientos. Además, espera que se pueda mantener el sistema regulatorio actual, que permite agilizar los procesos de aprobación y acceso de medicamentos. También apunta a la necesidad de que se apliquen los procesos aduaneros mínimos, para que no se interrumpa o dificulte el acceso a todos los pacientes. Así, piden garantizar la facilidad de movimiento para el talento global y llaman a mantener las colaboraciones en materia de I+D.

Por otro lado, Balaguer puso sobre la mesa las inversiones realizadas por las compañías farmacéuticas para garantizar el suministro. Una estrategia que, para GSK en concreto asciende a 80 millones de euros.