El abastecimiento de medicamentos en el exterior es su principal función
Un centenar de productos son elaborados por los farmacéuticos militares
LUCÍA GALLARDO
Barcelona
Si bien no es muy conocida por el colectivo farmacéutico, aunque recientemente fue noticia por el robo cometido por el que hasta 2006 fue jefe de la sección de farmacia de la Academia General del Aire de San Javier, la farmacia militar tiene una larga tradición y desarrolla una intensa actividad en la gestión de la ordenación farmacéutica y en la producción de elaborados farmacéuticos.
Entre sus misiones más destacadas está la de coordinar con los Ejércitos el apoyo farmacéutico y el abastecimiento y mantenimiento del material sanitario. Dos unidades de apoyo son las encargadas de fabricar y distribuir los medicamentos y este tipo de material a la Armada y a los Ejércitos de Aire y Tierra, tanto en el territorio nacional como en el exterior. En la actualidad hay 142 profesionales dedicados a la farmacia militar, que espera que los ministerios de Sanidad y de Defensa elaboren un RD que desarrolle la Ley de Garantías en cuanto a los servicios de las Fuerzas Armadas (FF.AA.).
Los preparados farmacéuticos, que son otra actividad destacada, alcanzan la centena, y tal y como explica el coronel Augusto Bedate, de la Jefatura de Farmacia de la Inspección General de Sanidad, su inclusión en el catálogo de medicamentos elaborados por las FF.AA. “se rige por criterios estrictos que consideran aspectos logísticos y operativos, si se utilizan en la protección nuclear, biológica o química, o si son medicamentos huérfanos”. El destino de estos productos son las unidades de los ejércitos y el personal militar, “aunque haciendo un esfuerzo en el apoyo a las tropas en las operaciones exteriores”, añade.
De cualquier forma, los militares en España también pueden beneficiarse de estos preparados, así como del resto de especialidades farmacéuticas, a precios muy ventajosos, mediante la Tarjeta de Farmacia Militar. Una orden ministerial de 2004 trató de mejorar la utilización de este documento, estableciendo quién puede ser beneficiario de los servicios farmacéuticos de las FF.AA. con servicio de venta al público. Aparte de los profesionales vinculados al ámbito militar, pueden hacer uso de esta tarjeta “los familiares o personas que estén incluidas como beneficiarios en la tarjeta de asistencia del Instituto Social de las Fuerzas Armadas o que habiten en el domicilio del titular”.
A este respecto, el coronel Bedate matiza que la dispensación a los usuarios, ya sea el personal militar o los beneficiarios, así como la Atención Farmacéutica que reciben, “no son funciones primordiales de las farmacias militares, como sí lo son las actividades analíticas en el campo de la toxicología o de aguas y el apoyo a las unidades”.
En la actualidad, hay unas 40 farmacias militares, de las cuales el 80 por ciento se hallan en el interior de las bases militares. Como en cualquier institución del Estado, su gestión administrativa y comercial se realiza según la Ley de Contrataciones del Estado, y las adquisiciones de medicamentos y principios activos se hacen mediante expedientes de adquisición, mientras que la facturación se realiza a través de los servicios de intendencia y pagaduría.
