irene fernández
Madrid
Desmitificar el uso de plantas medicinales en el tratamiento del sobrepeso ha sido el motor de arranque de la campaña informativa promovida por el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (Infito), iniciada a finales del pasado mes de mayo en las farmacias españolas, sobre cómo perder peso con dieta, ejercicio y las propiedades de estas plantas.
La primera comunidad autónoma en la que se inició fue Cantabria, en cuyas farmacias se dispensan unos 55.000 preparados de plantas medicinales para perder peso al año (la mayoría en época estival). Al cierre de esta edición, según Infito, la campaña se ha extendido ya a casi todo el territorio español, a excepción de Castilla y León y Castilla-La Mancha.
Esta campaña consta de materiales gratuitos para profesionales de la salud y pacientes, y un equipo de expertos en fitoterapia que visitará las farmacias ofreciendo su apoyo al farmacéutico, aunque todo esto puede variar en función del colegio de farmacéuticos de cada comunidad. El material consiste en una guía con los últimos estudios sobre plantas medicinales en el sobrepeso y un libro para pacientes sobre mitos y falsas creencias del uso de estas plantas, que puede adquirirse de forma gratuita en la web de Infito y farmacias.
“Nuestro objetivo es que se contemple las plantas medicinales como una opción con pocos efectos adversos y eficaces, siempre que se utilice adecuadamente acompañada de un incremento del ejercicio físico y un ajuste de la dieta”, declaró a MP Teresa Ortega, vicepresidenta de Infito.
Además, este centro pone de manifiesto en su última encuesta que uno de cada cuatro españoles, en concreto un 26 por ciento, tiene intención de adelgazar este verano. Entre ellos, un altísimo porcentaje tienen intención de utilizar plantas medicinales, y todos ellos preferirían que el médico fuera quien se las recomendase.
Porque lo cierto es que, según Ortega, la población española ha experimentado un cambio de mentalidad en los últimos años. Antes, se decantaban por “lo natural”, consiguiendo estas plantas en la calle y no en las farmacias, porque pensaban que en estas últimas serían sintéticas. Sin embargo, su demanda en las boticas ha crecido. “Los productos que se dan para una indicación terapéutica como el tratamiento de la obesidad deben dispensarse en farmacias porque, además, éstas cumplen por ley unas condiciones de climatización especiales”, aseguró.
El farmacéutico se encargará del seguimiento del paciente, porque no todas las plantas son iguales. Algunas, como el glucomanano, provocan sensación de saciedad, y otras como la Garcinia cambogia evitan los depósitos grasos.
