La Industria Mundial de la Automedicación Responsable celebra su 40º aniversario con una publicación que revisa la evolución del sector

Repasa los principales hitos que se han producido en el autocuidado en el desarrollo institucional y en la aprobación de principios activos

| 2010-12-17T17:02:00+01:00 h |

rocío bueno

Madrid

Desde la primera aprobación como OTC de los descongestionantes nasales en Estados Unidos en 1976 hasta la del pantoprazol en la Unión Europea el pasado 2009 han transcurrido casi 40 años en los que el sector de los medicamentos sin receta ha vivido grandes y significativos cambios. Con motivo de la celebración del 40º aniversario de su nacimiento, la Industria Mundial de la Automedicación Responsable (WSMI) ha publicado una revisión de esta evolución en un libro titulado, La historia del autocuidado y la automedicación. 40 años de progreso.

El volumen realiza un recorrido por la historia del sector OTC y atiende a los hitos que marcaron un antes y un después, tanto en el ámbito organizativo e institucional, como en el de la aprobación del cambio de estatus de los distintos principios activos que hoy por hoy forman parte del listado de medicamentos sin prescripción en los distintos países.

Los años setenta constituyen el punto de partida en el crecimiento del sector, cuyo papel adquiere creciente relevancia en los sistemas sanitarios actuales. Y es que, tal y como señala en la introducción de la obra David Webber, director general de la WSMI, en las últimas cuatro décadas se ha producido un retroceso del modelo de salud del “paternalismo” y un avance del centrado en el enfoque personal, incluyendo el autocuidado con fármacos OTC.

“Hoy, la automedicación responsable con medicamentos sin prescripción es reconocida cada vez más como la primera línea de tratamiento y como la base de la salud pública y los sistemas sanitarios”, asegura Webber. Frente al impulso del tratamiento directo, este modelo propugna así la implementación de la prevención “a través del autocuidado individual evitando factores de riesgos como el tabaquismo o la obesidad”.

De los parches al omeprazol

Tras el nacimiento de la WSMI en 1970 y el fortalecimiento del papel de los individuos en su propia salud con la “Declaración de los Derechos de los Pacientes”, realizada por la Asociación Médica Mundial (WMA), el periodo que transcurre hasta la década de los noventa fue testigo de la llegada al área OTC del ibuprofeno, la hidrocortisona o el chicle de nicotina, que comenzó a comercializarse sin prescripción médica en Australia en 1988.

Más tarde, los avances en el establecimiento de los principios fundamentales de la automedicación gracias a la actuación conjunta de la WSMI, la Federación Farmacéutica Internacional (FIP) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), transcurren paralelos a los switches de moléculas como el aciclovir o la ranitidina y la comercialización de los parches de nicotina. Con el cambio de siglo y el impulso de los sistemas de prevención gracias al aumento de la información, llegan al grupo de los ‘sin receta’ el omeprazol (Reino Unido y EEUU) y el orlistat, el primer OTC aprobado por procedimiento centralizado en la UE.