EL GLOBAL Madrid | miércoles, 03 de febrero de 2016 h |

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha solicitado un plazo de un mes para negociar con partidos de izquierda y derecha un gobierno estable. La tarea encomendada por Felipe VI abre así la vía de la ‘contrarreforma sanitaria’ o de la vuelta al Real Decreto/ley 9/2011. Su alcance dependerá de los colores que pueda aglutinar el posible gobierno y los aspectos que cada formación ‘sacrifique’ en aras del consenso.

Sánchez tiene cuatro semanas para sacar del inmovilismo a quienes, por ahora, frenan cualquier opción en su investidura. El acuerdo de izquierda con la abstención de los partidos nacionalistas no cuenta con el beneplácito del partido; y el acuerdo con Podemos y Ciudadanos no cuenta con el beneplácito de Podemos ni de Ciudadanos. Cada opción arroja un posible escenario en Sanidad.

La primera no tendría muchos problemas en derogar el Real Decreto-ley 16/2012 y volver al marco que el Partido Socialista dejó en el año 2011, aderezado con una propuesta de subastas de medicamentos a nivel nacional. El Ejecutivo no solo conseguiría ahorros económicos sino que acabaría con la litigiosidad en Andalucía, lo mismo que hizo el PP con el ‘cataloguiño’. Esta opción tampoco garantiza el futuro del pacto sobre PIB con la industria farmacéutica.

En cambio, la presencia de Ciudadanos es una variable que puede tener mucho peso a la hora de definir el alcance de una contrarreforma. La formación de Albert Rivera ha sido muy crítica en algunos aspectos, pero por activa y por pasiva ha declarado que nunca ha sido partidaria de derogar el 16/2012. Asimismo, y aunque ha criticado la premura con la que se firmó el pacto con la industria farmacéutica, Ciudadanos ha hablado, en todo caso, de ‘flexibilizar’ este nuevo marco.