La resistencia bacteriana a los antibióticos representa una amenaza creciente para la salud pública a nivel mundial. En este contexto, la investigación reciente realizada por el Instituto Wellcome Sanger, la Universidad de Oslo y la Universidad de Cambridge destaca un hallazgo crucial: la necesidad imperante de continuar utilizando la genómica para obtener una comprensión detallada de los impulsores subyacentes del éxito bacteriano. Este enfoque se revela como fundamental para lograr controlar de manera efectiva la propagación de las superbacterias.
Enfoque más preciso
Durante las últimas dos décadas, los investigadores han llevado a cabo un estudio comparativo del impacto del uso de antibióticos en Escherichia coli (E. coli) en el Reino Unido y Noruega. Contrario a la creencia común de que el uso de antibióticos es el único impulsor de la resistencia, los resultados revelan que otros factores desempeñan un papel crucial en el desarrollo de bacterias resistentes al tratamiento.
Los resultados revelan que otros factores desempeñan un papel crucial en el desarrollo de bacterias resistentes al tratamiento.
Uno de los hallazgos más significativos es la variabilidad en la resistencia según el tipo de antibiótico de amplio espectro utilizado. La tasa de resistencia a un antibiótico comúnmente empleado para tratar infecciones del tracto urinario causadas por E. coli osciló entre el 8.4 por ciento y el 92.9 por ciento, dependiendo del país y del antibiótico específico en uso. Esto resalta la complejidad del fenómeno y la necesidad de un enfoque más preciso en la gestión de la resistencia bacteriana.
Además, se observó que los niveles de uso de antibióticos a nivel nacional también influyeron en la tasa de resistencia. En el Reino Unido, por ejemplo, los beta-lactámicos no penicilínicos se utilizaron tres a cinco veces más en promedio por persona en comparación con Noruega, lo que condujo a una mayor incidencia de infecciones multirresistentes causadas por una cepa específica de E. coli.
Factores genéticos
El estudio subraya la importancia de considerar tanto los factores genéticos como el entorno bacteriano circundante. La supervivencia de bacterias multirresistentes depende de las cepas de E. coli presentes en el entorno, lo que hace imposible determinar si un tipo específico de antibiótico tendría el mismo efecto en la propagación de bacterias resistentes en diferentes países.
“Continuar utilizando la genómica para obtener una comprensión detallada de los impulsores subyacentes del éxito bacteriano es crucial si queremos controlar la propagación de superbacterias”
Jukka Corander, autor principal del estudio
El profesor Jukka Corander, autor principal del estudio, enfatiza que “continuar utilizando la genómica para obtener una comprensión detallada de los impulsores subyacentes del éxito bacteriano es crucial si queremos controlar la propagación de superbacterias”. Este llamado resalta la necesidad de invertir en investigaciones y tecnologías que nos permitan profundizar en la genética bacteriana para desarrollar estrategias de control más efectivas.
En conclusión, la investigación destaca la complejidad de la resistencia bacteriana y la importancia de ir más allá del simple uso de antibióticos. La genómica emerge como una herramienta esencial para desentrañar los misterios detrás del éxito bacteriano y, por ende, para desarrollar estrategias más efectivas que nos permitan enfrentar la amenaza constante de las superbacterias en nuestro entorno.
