Mucho se habla estos días en torno a la búsqueda de mascarillas en las farmacias españolas a consecuencia de la expansión del coronavirus. En España se ha pasado de los intentos de acopio masivo por parte de la comunidad china de todas las unidades disponibles en estos establecimientos (provocando el sold out), a su también búsqueda por los ciudadanos españoles. Entre medias, la positiva actitud de la mayor parte de las farmacias recordando que no son eficaces para protegerse del virus y reservando existencias para casos de necesidad. En el extremo opuesto, algunos establecimientos han aprovechado esta escasez, y la alarma ciudadana, para beneficiarse comercialmente.

En Francia, es el propio Gobierno quien ha tomado las riendas en torno al racionamiento de las mascarillas. Y, en concreto, la disponibilidad de estos productos para colectivos de servicio público. Como parte de este objetivo, el Gobierno galo ha decidido distribuir entre toda la red de farmacias un “stock estatal” de 10 millones de mascarillas que únicamente pueden ser entregadas de forma gratuita a profesionales sanitarios. Incluso, este stock podría ampliarse próximamente según necesidades con el reparto de 15 millones de mascarillas adicionales.

500 unidades por farmacia

Así, cada establecimiento recibirá en torno a 500 unidades (diez cajas de 50 mascarillas), que deberán situar de forma visible y diferenciada a sus posibles propias existencias mediante el cartel “existencias estatales”. Estas mascarillas tienen por fin poder ser entregadas a cualquier profesional sanitario que las reclame: médicos, enfermeros, dentistas, fisioterapeutas, matronas, etc.

Cada farmacia francesa recibirá del Gobierno 10 cajas de 50 mascarillas.

Éstos deberán presentar su tarjeta/credencial sanitaria para su retirada, con un límite de una caja por sanitario y solicitud (50 unidades). Cabe recordar que, por su importancia como servicio público, los profesionales sanitarios son un colectivo en el que se recomienda el uso de mascarillas (también en el ámbito privado) como medida preventiva.

Ahora bien, tal como recoge el medio especializado Le Quotidien du Pharmacien, el Ministerio de Salud ha especificado otros posibles justificaciones de las peticiones. Por ejemplo, “en una situación en la que un personal sanitario está en contacto con una persona que muestra signos de infección respiratoria y en ausencia de otro equipo de protección personal, pueden adoptar el principio de la doble máscara (cuidador / cuidado)”.

“No aceptaremos especulaciones”

De forma paralela a esta decisión, el Ministerio de Economía francés ha informado que no permitirá “ninguna especulación” con la venta de estos productos. Por ello, vigilará “de forma estrecha” una posible inflación de precios. Incluso, no se descarta regular los precios por decreto ante cualquier abuso que se detecte.