La Comisión Europea (CE), la Red de Jefes de Agencias de Medicamentos (HMA, por sus siglas en inglés) y la Agencia Europea de Medicamentos (en inglés, EMA) han publicado una serie de recomendaciones para anticiparse a los posibles problemas de suministro de cara a la próxima temporada de invierno. En esta publicación se incluyen sugerencias respecto a la amoxicilina, la amoxicilina/ácido clavulánico o la azitromicina, destinados al tratamiento de infecciones respiratorias.
Las recomendaciones incluidas en esta publicación han sido elaboradas por el Grupo Directivo Ejecutivo sobre Desabastecimiento y Seguridad de Medicamentos (MSSG, en inglés), formado por la CE, la EMA y HMA –al que pertenece la Agencia Española del Medicamento y el Producto Sanitario (Aemps)–. Estas son complementarias al desarrollo de un listado de medicamentos esenciales en el seno de la UE.
De forma paralela a estas acciones, desde una perspectiva de prevención, la Aemps señala que está en contacto continuo con las diferentes compañías farmacéuticas, controlando su stock, así como el consumo de los diferentes medicamentos. El objetivo es poder tomar medidas adicionales en caso de que, en base a estas previsiones, se considerase necesario.
Previsión ante desabastecimientos
En este sentido, desde la Aemps señalan que, si la demanda de antibióticos en invierno se mantiene en niveles similares a los anteriores, los datos recopilados en la UE sugieren que el suministro de formulaciones orales de antibióticos, de primera y segunda elección, para infecciones respiratorias, igualará a esta demanda. Así, apuntan que tanto la EMA, como la Autoridad Europea de Preparación y Respuesta ante Emergencias Sanitarias (HERA, en inglés) seguirán trabajando con los titulares de autorización de comercialización (TAC), para reforzar las medidas de aumento del suministro de algunos antibióticos intravenosos.
Las recomendaciones del MSSG ante un eventual problema de suministro de antibióticos se resumen en los siguientes puntos:
- Aumentar ahora la producción de antibióticos esenciales: para evitar el desabastecimiento en otoño e invierno. Una acción temprana debería dar a los fabricantes tiempo suficiente para asegurarse de que tienen suficiente capacidad de fabricación para satisfacer la demanda.
- Supervisión de la oferta y la demanda: la EMA y la Comisión Europea, junto con los Estados miembros, seguirán supervisando estos factores en cooperación con las empresas. Dado que las medidas adoptadas están diseñadas para garantizar el suministro, se recuerda a todas las partes interesadas que pueden realizar pedidos de medicamentos con normalidad, sin necesidad de hacer acopio. El almacenamiento de medicamentos puede ejercer más presión sobre los suministros y causar o empeorar la situación de escasez.
- Conciencia pública y uso prudente: los antibióticos deben usarse con prudencia para mantener su eficacia y evitar la resistencia a los antimicrobianos. Los profesionales de la sanidad tienen un papel clave, ya que los antibióticos solo deben recetarse para tratar infecciones bacterianas. No son adecuados para el tratamiento de infecciones virales como el resfriado y la gripe. También se recomienda llevar a cabo iniciativas de sensibilización ciudadana al respecto.
“La disponibilidad de medicamentos es un componente crucial de una UE de la Salud fuerte. Es esencial que tomemos medidas ahora para prepararnos antes del próximo invierno y garantizar que se evite la posible escasez de medicamentos antibióticos”, ha señalado Stella Kyriakides, comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria. Así, considera que con estas recomendaciones se está dando “un paso importante en las medidas para abordar nuestras necesidades inmediatas de antibióticos clave, complementando el proceso en curso para desarrollar una lista de la UE de medicamentos críticos”. “El seguimiento operativo por parte de HERA y EMA ahora seguirá como una prioridad”, ha concluido.
Por su parte, Emer Cooke, directora de la EMA, coincidió en la importancia de que los fabricantes “tomen medidas tempranas, antes de la temporada de invierno, para que puedan aumentar la capacidad de fabricación cuando sea necesario”.