La directiva europea de asistencia sanitaria transfronteriza, que data de 2011, aún se encuentra esperando su transposición en la mayoría de los países europeos. España es uno de ellos y la sanidad privada quiere que durante su futura adaptación se le tenga en cuenta. Así, una de las demandas que han presentado aprovechando el escenario de la Feria Internacional de Turismo (Fitur), ha sido que sus hospitales sean tenidos en cuenta a la hora de derivar pacientes europeos que quieran (o tengan, en caso de urgencia) ser atendidos en España.
Sin embargo, existen varios problemas a resolver. Las diferencias entre comunidades autónomas, que son las que finalmente tienen las competencias en gestión sanitaria, unido a la falta de información disponible sobre la directiva son los más acuciantes. Aún así, desde la alianza de la Sanidad Privada de España se trabaja codo con codo con el Ministerio de Sanidad para acelerar la transposición al tiempo que se tiene en cuenta el potencial de este sector para recibir pacientes europeos.
El número de pacientes internacionales se ha disparado en los últimos años. De hecho, en clínicas como Centro Médico Alomar, presente en Fitur como representantes de este turismo sanitario, se ha notado un fuerte incremento del número de pacientes internacionales en los últimos años. En la actualidad, alrededor de la mitad de los pacientes que visitan esta clínica proceden de fuera del territorio nacional. IDIS estima que el turismo sanitario supondrá más de 1.000 millones de euros en 2020, un crecimiento del 40 por ciento respecto a las previsiones de la industria del turismo sanitario para este año.
