El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, ha presentado el nuevo plan del ejecutivo para mejorar la atención primaria (AP), una cuestión que ha preocupado a las autoridades británicas desde hace meses. De hecho, Sunak ya se reunió el pasado enero con los responsables de la sanidad pública y con expertos del sector de la sanidad con el objetivo de mejorar el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas inglés). Ahora, cuatro meses más tarde, ha presentado los puntos más relevantes del llamado ‘Plan de Recuperación de Atención Primaria‘. Un programa que abre la puerta a la prescripción farmacéutica, es decir, que los propios usuarios “puedan obtener medicamentos recetados directamente de una farmacia, sin una cita con el médico de cabecera”.

La principal razón que justifica esta medida es «modernizar la forma en que funciona la atención primaria para satisfacer la demanda de los pacientes y ayudar a reducir las listas de espera del NHS». Es decir, mejorar el acceso a la atención primaria mediante la descongestión de la misma. «Al expandir el papel de las farmacias, menos personas necesitarán ver a su médico de cabecera», argumentan en un comunicado de la oficina del primer ministro. Con este plan esperan liberar cerca de 15 millones de citas con el médico de cabecera durante los próximos dos años.

Detalles de la prescripción farmacéutica

Tal y como informa el Gobierno británico, por primera vez los pacientes que necesitan medicamentos recetados podrán obtenerlos directamente en una farmacia, sin una cita con el médico de cabecera. Esta prescripción podrá llevarse a cabo para dolencias como dolor de oído, dolor de garganta o infecciones del tracto urinario.

En concreto, este servicio permitirá a los farmacéuticos suministrar medicamentos con receta, incluidos antibióticos y antivirales cuando sea clínicamente apropiado, para tratar siete afecciones de salud comunes sin necesidad de visitar a un médico de cabecera: sinusitis, dolor de garganta, dolor de oído, picadura de insecto infectado, impétigo, culebrilla e infecciones del tracto urinario en mujeres.

Este plan prevé una inversión gubernamental que se cifra en 645 millones de libras durante dos años para ampliar los servicios de farmacia comunitaria. Los pacientes también podrán obtener la medición de su tensión arterial o solicitar píldoras anticonceptivas. Unas medidas que incluyen servicios de fisioterapia, consulta al podólogo o test auditivos sin necesidad de consulta al médico de familia.

Postura del CGCOF

Desde el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) explican que es «una buena noticia el que cada vez más países de todo el mundo confíen en la farmacia para reforzar la capacidad asistencial de sus sistemas sanitarios», pero no respaldan un diagnóstico y prescripción que «corresponde al médico y no es una petición de los farmacéuticos».

En este sentido, desde la organización farmacéutica colegial defienden la indicación farmacéutica con medicamentos que no precisan receta porque «está demostrado que contribuye a descongestionar la atención primaria» y proponen, además, la concertación de una cartera de servicios farmacéuticos en torno al medicamento y la salud pública «que dotaría de eficacia y eficiencia al Sistema Nacional de Salud».


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