Desde que se hiciera público el dictamen de la Comisión para la Reconstrucción del grupo de trabajo de Sanidad y Salud Pública la inquietud generada entre las sociedades científicas por el famoso punto 47.2 relativo a la formación continuada y la colaboración público-privada ha ido en aumento.

Una decisión que podría tener poca trayectoria a juicio de los dos portavoces de la Comisión de Sanidad del Congreso del PP y Ciudadanos; Elvira Velasco y Guillermo Díaz. Así lo han asegurado en un encuentro virtual organizado por esta publicación ‘El Futuro de los ACOD en la era post-Covid’.

Como ha explicado Díaz, “el 47.2 es una cuestión que ha hecho saltar y, con razón, varias alarmas. Son cuestiones muy antiguas de fobias al sector privado, que no va a prosperar, porque ni el PP ni Ciudadanos quieren”, ha adelantado.

Batería de iniciativas

Así, Díaz ha recordado que al igual que el Partido Popular mostró su disconformidad, Ciudadanos introdujo una enmienda, respaldada por los populares, para contrarrestar el famoso artículo. “Se trata de una enmienda que apuesta por impulsar la transparencia y la claridad en ese tipo de relaciones, con lo cual, en el mismo texto aparece el fomento de la transparencia”. Un texto que complicaría, de este modo, sacar adelante el punto aprobado en cuestión.

En este sentido, el portavoz de la formación naranja ya ha confirmado la intención de que el Grupo Ciudadanos en la Cámara Baja respalde cualquier iniciativa del Grupo Popular encaminada a revertir la situación. “No creo que esta decisión se lleve a cabo. Haría falta más mayoría”, ha dicho el portavoz de Ciudadanos. “Nos opondremos a otras cuestiones donde se intuya la fobia a la colaboración público-privada. Son fobias de otros que no creo que consigan imponerse”.

La enmienda número 3

En concreto, Guillermo Díaz hace mención a la enmienda que modificaría el artículo 2.8. Esta apuesta por “promover una cultura de buenas prácticas y de ética profesional con el desarrollo de normativas en pro de una buena gobernanza, que entre otros puntos incluyan: obligaciones de transparencia y publicidad activa: códigos éticos y de conducta, sistemas de buenas prácticas, normas y procedimientos operativos estandarizados: regulación de la actividad de los grupos de interés en el ámbito sanitario y farmacéutico y de conflictos de interés; protección de denunciantes, etc… Todo ello formando parte de una estrategia de buena gobernanza y de prevención del fraude y la corrupción en sanidad”.

De este modo, la enmienda introduce, entre las normativas de una buena gobernanza la regulación de la actividad de los grupos de interés en el ámbito sanitario y farmacéutico.

En esta línea, Velasco también ha recordado la batería de propuestas que tienen pendientes. “Hay cosas que no nos gustan”, ha señalado. Así, la portavoz del Grupo Popular ha aludido al desconocimiento en este terreno. “Daremos la batalla donde corresponda”, ha sentenciado.

El presidente de la Sociedad Española de Cardiología, Ángel Céquier, por su parte, ha añadido que “es de agradecer contar con una visión diferente del papel que jugamos las sociedades científicas y de nuestra relación con la industria, ya que una visión diferente implica un desconocimiento profundo de la situación del país”. Un agradecimiento que han secundado, el vicepresidente de Semergen, José Polo, quien ha recordado al posicionamiento de Facme, donde reclaman una mayor interlocución por parte de las sociedades científicas; y el presidente de Freno al Ictus, Julio Agredano.