La compañía ViiV Healthcare está integramente dedicada al VIH. En mayo anunciaba la detención de un estudio que evaluaba la eficacia y seguridad de cabotegravir en profilaxis pre-exposición, por los buenos datos recopilados hasta el momento. Felipe Rodríguez, director médico de España y Portugal de ViiV Healthcare, detalla algunos de los hallazgos de este estudio. Asimismo, explica qué supone en la prevención y tratamiento del VIH contar con tratamientos con una posología más cómoda para sus pacientes.
Pregunta. ¿Por qué se decidió detener el estudio en el que se probaba la eficacia y seguridad de cabotegravir?
Respuesta. El estudio HPTN 083 compara de forma ciega la eficacia y seguridad en profilaxis pre-exposición (PrEP) al VIH de cabotegravir inyectable de acción prolongada que se administra por vía intramuscular frente a tenofovir disoproxil fumarato/emtricitabina (TDF/FTC) oral, en hombres y en mujeres transgénero, que tienen sexo con hombres. Este estudio cuenta con un comité independiente, Data and Safety Monitoring Board (DSMB), que valora la seguridad y eficacia de los medicamentos mencionados dentro del ensayo clínico, mediante evaluaciones periódicas programadas. Esto es habitual en los ensayos clínicos y el objetivo de este comité es aportar una visión experta externa para aconsejar al espónsor del estudio y poder tomar decisiones sobre su continuación, modificación, o finalización si fuera necesario, antes de completar la duración planificada del estudio.
En el caso del estudio HPTN 083, el DSMB sugirió que el estudio debía interrumpirse porque, con los pacientes seguidos hasta ese momento, existía suficiente evidencia para pensar que el tratamiento con cabotegravir inyectable de acción prolongada funcionaba mejor que TDF/FTC oral en la prevención de la infección por VIH. Esta decisión es importante para el paciente ya que a partir de ese momento el paciente se puede beneficiar del régimen farmacológico que mejor ha funcionado independientemente del brazo en el que empezó el estudio. La decisión del DSMB fue aprobada por el U.S. National Institute of Allergy and Infectious Diseases (NIAID), integrante de los NIH, National Institutes of Health, promotor del estudio junto con ViiV Healthcare.
P. ¿Qué ventajas ofrece cabotegravir en la prevención del VIH respecto a otros tratamientos, tanto a nivel de eficacia como respecto a su método de administración?
R. En este momento el único régimen aprobado para su utilización en Profilaxis Pre-Exposición es la combinación de TDF/FTC oral diario, por esta razón la comparación de cabotegravir inyectable de acción prolongadavse realizó frente a este régimen. Es pronto para poder detallar todas las ventajas de esta pauta, sin conocer los datos finales que se comunicarán en el congreso AIDS 2020 en Julio. Mientras tanto si podemos comentar algunos de los aspectos claves de este fármaco en investigación:
- Es un inhibidor de la integrasa con alta barrera genética
- La vía y la frecuencia de administración es diferente, ya que una vez aprobado cuando se comercialice, será el primer inyectable administrado por vía intramuscular cada 2 meses por ser de acción prolongada.
- Como se había anticipado, es un 69 por ciento más eficaz (IC 95 por ciento ; 41 por ciento a 84 por ciento) para la prevención del VIH en hombres que tienen sexo con hombres (HSH) y mujeres transgénero que tienen sexo con hombres que el estándar actual basado en comprimidos orales diarios de TDF/FTC.
P. En términos de seguridad, ¿presenta alguna diferencia respecto a los tratamientos con los que se ha comparado?
R. La seguridad fue similar en los dos grupos. La mayoría de los participantes del grupo de cabotegravir (80 por ciento) reportaron dolor o sensibilidad en el lugar de la inyección, en comparación al 31 por ciento de los participantes del brazo TDF/FTC, que recibieron inyecciones de placebo. La tasa de discontinuación debido a reacciones en el lugar de la inyección o a intolerancia a la inyección en el brazo de cabotegravir fue del 2 por ciento, y no hubo discontinuaciones por reacciones en el lugar de la inyección en el brazo de TDF/FTC.
Hasta el momento no disponemos de más información respecto a cabotegravir en PrEP, pero pronto podremos tener más datos de seguridad. Sin embargo, ya hay publicados datos de eficacia y seguridad de cabotegravir en pacientes con infección por el VIH de los estudios de fase III ATLAS (Swindells S, Andrade-Villanueva JF, Richmond GJ, et al. Long-Acting Cabotegravir and Rilpivirine for Maintenance of HIV-1 Suppression. N Engl J Med. 2020;382(12):1112-1123.) y FLAIR (Orkin C, Arasteh K, Górgolas Hernández-Mora M, et al. Long-Acting Cabotegravir and Rilpivirine after Oral Induction for HIV-1 Infection. N Engl J Med. 2020;382(12):1124-1135).
Estos estudios incluyeron pacientes infectados por el VIH que estaban con carga viral indetectable. Es decir controlados con otros tratamientos antirretrovirales orales, antes de cambiar al régimen de cabotegravir + rilpivirina inyectable AP. En ambos estudios, el análisis de los datos de seguridad mostró que es un régimen bien tolerado. También cuenta con un perfil de aparición de acontecimientos adversos similar a los otros tratamientos con los que se ha comparado; en ningún caso impactó de forma significativa en el número de discontinuaciones del estudio.
P. ¿Qué supondría la aprobación de cabotegravir para la evolución del VIH a nivel global?
Los resultados del estudio HPTN083 serán fundamentales para la presentación a registro de cabotegravir inyectable de acción prolongada intramuscular para indicación de uso en PrEP. Los resultados de este estudio han demostrado que la administración de cabotegravir inyectable de acción prolongada no solo puede reducir la transmisión del VIH sino que además lo ha hecho en una población con suficiente representación de HSH de color y joven, así como en mujeres transgénero. Estos datos son esperanzadores de cara a poder reducir la transmisión del VIH en aquellas poblaciones más vulnerables.
P. Relacionando el VIH con la crisis de Covid-19, ¿se ha detectado alguna carencia en este período respecto a los pacientes de VIH, tanto en términos de tratamiento como en su prevención?
La infección por COVID 19 no ha tenido impacto en el estudio HPTN 083 y lo único que podemos comentar es que nuestra compañía ha puesto todos los medios posibles para que los pacientes que recibían nuestros fármacos. Tanto en los ensayos clínicos como en la rutina asistencial, no tuvieran problemas de suministro. Nos consta que en España los hospitales y sus profesionales sanitarios han facilitado al máximo que los pacientes recibieran la medicación de forma adecuada, en ambos escenarios.
P. Siguiendo este hilo, ¿qué impacto tiene contar con tratamientos con una posología más cómoda tanto para prevenir como para tratar el VIH?
R. El cumplimiento terapéutico es fundamental para el tratamiento adecuado de la infección por VIH, por lo tanto, disponer de regímenes de fármacos antirretrovirales que se toleren bien, con pocas interacciones medicamentosas y que permitan administraciones más distanciadas, garantizando la eficacia y seguridad, puede impactar en la satisfacción para el médico y paciente y al final en una mejora del control de la infección por VIH. Como comentamos más arriba, cabotegravir forma parte del primer régimen antirretroviral para el tratamiento y profilaxis preexposición que se administra intramuscular cada 2 meses.
Que la posología sea más cómoda, facilita el cumplimiento, y además, en este caso, al ser inyectable, lo administra directamente un profesional sanitario. Estamos convencidos que cabotegravir será un avance relevante en el tratamiento y prevención del VIH.
P. ¿Qué aprendizajes deberíamos extraer de esta crisis provocada por la Covid-19 respecto al abordaje del VIH en el hipotético caso de que surgiera una crisis similar en el futuro?
La respuesta a esta pregunta seguramente corresponde a las autoridades y profesionales sanitarios que han vivido en primera persona los problemas del abordaje del VIH durante la pandemia del COVID-19. Por nuestro lado reiterar que ViiV HC ha conseguido una buena coordinación con hospitales y profesionales sanitarios para garantizar que el acceso a nuestros medicamentos fuera adecuado tanto a nivel asistencial como en ensayos clínicos. Esto nos ayudará a planificar situaciones similares que puedan suceder en el futuro evitando el impacto en las personas que viven con VIH.