Buen día el elegido por Fedifar para que su Comisión Delegada debata el documento presentado por Cofares y Asecofarma para establecer las bases sobre las que tenga que moverse la patronal de la distribución española en un futuro. Ni más ni menos que el 23 de febrero. O como se suele decir desde hace ya 28 años, el 23-F.
No creemos que sea necesario la aparición de un teniente coronel (pongamos que se llame Antonio, Tejero, naturalmente) para que, pistola en mano y tricornio en la cabeza, sea capaz de que los socios de la patronal de la distribución española se sienten y no se levanten hasta no alcanzar un acuerdo sobre los pasos a dar para construir el futuro de Fedifar.
Tampoco creemos que nadie dispare ningún tiro al aire, porque pensamos que el ejercicio de responsabilidad que se debe exigir y deben exigirles sus cooperativistas a los representantes de la distribución española está muy por encima de eso.
El 23-F de la distribución española debe servir para poner las cosas claras, para saber si se recorre el camino conjunto, por separado o, sin mezclarse, uno a lado de otro. Porque, en definitiva, cualquier imagen que no sea la de una patronal fuerte (o dos, o tres, o…) repercute en los intereses de todos. Y más en este momento por el que atravesamos.
Por ese motivo, y sin que sirva de precedente, desde EG nos atrevemos a decir: “¡Se sienten, coño!”.