Aunque las cada vez más experiencias internacionales demuestran la eficacia de apostar por la vacunación antigripal en las farmacias para mejorar las tasas de cobertura y España tiene un problema en sus bajos índices, el Ministerio de Sanidad sigue sin plantearse la opción de apostar por estos establecimientos como puntos de inmunización complementarios.

¿La justificación? “Contamos con más de 13.000 centros de salud donde poder inmunizar”, ha defendido la directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Pilar Aparicio, en su intervención en la jornada “Farmacia comunitaria y vacunación antigripal” que se celebra este 5 de febrero en Madrid bajo la  organización del CGCOF y Sanofi Pasteur.

La responsable ministerial ha detallado este rechazo en que “el sistema sanitario español tiene su eje en la Atención Primaria y los centros ambulatorios, con horarios de mañana y tarde  que otorgan una alta accesibilidad que no tienen otros países”, en una comparación indirecta con esas experiencias internacionales donde sí se confía en las boticas como puntos complementarios de vacunación antigripal. Cabe recordar que desde el Consejo General de Farmacéuticos tampoco se aboga porque las farmacias puedan inmunizar de la gripe a la población, aunque se reconoce que “existen voces en la profesión que lo piden”.

Pilar Aparicio (directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad) durante su intervención en la jornada.

La realidad (y los datos) dicen que los porcentajes de cobertura vacunal en España están lejos del 75 por  ciento que marca como objetivo la OMS. Por ejemplo, en la última campaña antigripal (2018-2019), solo el 54,2 por ciento de mayores de 65 años (un grupo de riesgo  en el  que la  gripe tiene un alto impacto en la mortalidad) se inmunizó. Descartada la función de puntos de inmunización, el papel “fundamental” que otorga Aparicio a la red de 22.070 farmacias y los profesionales que en ellas ejercen es el de “promover que la población se vacune en los centros de salud”, ha indicado. “Todo lo que puedan hacer los farmacéuticos comunitarios en el objetivo común de mejorar las tasas de vacunación es fundamental”, ha añadido.

Frente a los recelos, colaboración

Por último, la responsable ministerial  ha hecho  un llamamiento a  la “colaboración entre  profesionales” frente a los recelos de las instituciones representativas de  Enfermería que, aprovechando la  celebración de esta  jornada, han vuelto a realizar un ataque a la farmacia comunitaria denunciando un supuesto  interés  de atribuirse funciones en la vacunación que, consideran, corresponden a su colectivo. “La labor de Enfermería en la vacunación es fundamental, pero todos los profesionales sanitarios tienen su papel en ella”, ha recalcado.