J. Ruiz-Tagle Madrid | viernes, 13 de septiembre de 2019 h |

Lo que se vivió el pasado día 10 de noviembre puede convertirse en un paripé más de los que se han vivido desde el pasado 28 de abril. El grupo socialista presentó el proyecto de Ley de Eutanasia para su admisión a trámite y recibió el apoyo mayoritario de la Cámara (sólo Vox y el Partido Popular votaron en contra). Lo que puede verse como un paso más hacia otorgar el derecho a decidir su muerte a un ciudadano no es tal si se repiten las elecciones. Si antes del 23 de septiembre no hay un presidente investido la jornada parlamentaria no habrá servido para nada porque las Cortes se disolverán y el proceso deberá volver a comenzar.

Ante esta realidad, pronto se pudo ver que el debate no iba sobre eutanasia. Apenas hubo mención a los profesionales sanitarios que deberán enfrentarse a esta realidad y las menciones que se hicieron sobre los pacientes estaban trufadas de un sentimentalismo demagógico que sustituyó al abordaje racional de la situación. Una prueba de ello es que los diputados encargados de fijar las posiciones de cada grupo no eran los portavoces de la Comisión de Sanidad, de ahí que el debate se moviera entre ejes de electoralismo o no o en otros más étereos como si la decisión de la vida de cada ciudadanos está en sus manos o en las de agún ser superior.

Comenzó el socialista Patxi López a defender la pertinencia de tomar en consideración la Ley de Eutanasia. “Hemos traído esta iniciativa porque simboliza muy bien lo que podría ser esta Legislatura.La Legislatura de la consolidación y conquista de nuevos derechos, la de la recuperación de las libertades perdidas. La Legislatura de la cohesión social y territorial. La del entendimiento y el progreso colectivo”. dijo. Además, López también semañó que quieren “reconocer y regular la eutanasia; un nuevo avance en derechos que, una vez más, vendrá de la mano del Partido Socialista”, dijo.


El debate no estuvo protagonizado por los portavoces de la Comisión de Sanidad


La frase sentó muy mal entre los diputados de Unidas Podemos. La diputada Noelia Vera se encargó de recordar que la primera iniciativa presentada en torno a este tema tenía la firma de su grupo y que se encontró con la oposición del Partido Socialista, que un mes después cambió de opinión para presentar esta misma ley que ya murió en la anterior legislatura por la misma razón que muera en esta ocasión: la disiolución de las Cortes por una convocatoria electoral. Además, recordó a López que “estamos a una semana de saber si vamos a ir a elecciones o no y están dando esperanzas a personas que necesitan esta ley”.

La diputada de Ciudadanos, Melisa Rodríguez, que apoyó la admisión a trámite aunque aseguró que “observan muchos peros en su redactado”, también acusó a los socialistas de electoralismo por anticipar este debate a la formación de gobierno. Además, aprovechó su intervención para reclamar la misma devoción en la ampliación de derechos en temas como la Ley de Dignidad al Final de la Vida o la gestación subrogada, bandera de la política social de Ciudadanos que ya ha sido rechazada por varios grupos de la Cámara, entre ellos el PSOE.


El PSOE defendió ser el garante de los nuevos derechos y la oposición le acusó de electoralismo


Desde el Partido Popular el encargado de defender el no a esta Ley fue José Ignacio Echániz. El diputado manchego aseguró que su principal argumento para tratar de evitar que se discuta la ley es que “ni los médicos ni el Comité de la Bioética de España están a favor de esta medida”. Asimismo, se sumó al resto de partidos en las acusaciones de electoralismo.

De una manera más agria se mostró la diputada de Vox Lourdes Méndez, quien acusó a los socialistas de promocionar la muerte. “Esta ley trata de poner toda la maquinaria del Estado a beneficio de la muerte… Sus razones son las mismas que se usaban en el Tercer Reich”, llegó a acusar a los diputados del PSOE. En lugar de una Ley de Eutanasia Méndez defendió poner en marcha una ley de Cuidados Paliativos, algo que también trató de poner en marcha Ciudadanos en la pasada legislatura y que el Partido Popular, tras escuchar las palabras del ‘popular’ José Ignacio Échaniz, vería con mejores ojos.