La apuesta del Gobierno por un cambio en el modelo productivo para mejorar la competitividad de la economía basándose en el valor añadido se ha reflejado en un incremento del 6,4 por ciento en el presupuesto —2.412 millones de euros— gestionado por el Ministerio de Ciencia. También se ha reflejado en una importante apuesta por la I+D civil, que se eleva hasta los 6.729 millones de euros (un 5,6 por ciento más). En concreto, destacan el aumento un 8 por ciento de los créditos del presupuesto no financiero en I+D+i para investigación civil, que ascienden a 2.845 millones de euros.
Esta apuesta ha llegado al programa de Investigación Sanitaria con una mejora en la dotación del Instituto de Salud Carlos III, que recibiría —si el proyecto presupuestario se aprobara en los términos actuales— 280 millones de euros (un incremento de 10 millones de euros o del 3,7 por ciento) que se distribuirán entre los Centros de Investigación básica y sanitaria de la red CIBER.
No son los únicos fondos con los que se nutriría la apuesta por la investigación sanitaria. En el mismo programa están también las Fundaciones del sector público estatal: el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas recibirá 23 millones de euros; el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares tendrá 18 millones y el Centro de Investigación de Enfermedades Neurológicas y la Fundación Española de la Ciencia y la Tecnología recibirán otros 18 millones.
