La consellera de Salut de Baleares, Manuela García, ha anunciado en el pleno del Parlament regional la puesta en marcha del Proyecto de desarrollo del Servicio de Atención Farmacéutica para el seguimiento de pacientes crónicos y polimedicados.

“Hemos creado un Grupo de Trabajo, un grupo de consenso, en el que está el Colegio de Médicos, el Colegio de Enfermería, el Colegio de Farmacéuticos, el Servei de Salut y la Dirección General de Prestaciones, Farmacia y Consumo “para que sean ellos los que elaboren este protocolo y que nuestros pacientes crónicos y polimedicados tengan un plan de actuación“, ha destacado la consellera, quien ha querido agradecer a todos los profesionales que participan en el proyecto su “disposición, compromiso, trabajo y entusiasmo”.

En este sentido, García ha afirmado que el proyecto piloto se pondrá en marcha “en breve” y notificarán los resultados. Y es que “lo que no se mide, no se puede mejorar”, ha aseverado. Así, ha concluido que “las políticas de este Gobierno van en línea de la mejora continua de las mismas”.

El papel de los farmacéuticos en el SNS

La consellera balear ha informado del proyecto a raíz de una pregunta planteada por María José Verdú i Torres, del Grupo Parlamentario Vox, acerca del papel que desempeña actualmente el farmacéutico en el sistema de salud. “Los farmacéuticos de Baleares llevan tiempo reclamando un papel más activo en la asistencia sanitaria pública e incorporar nuevos servicios farmacéuticos dentro de la sanidad pública para mejorar la atención sanitaria de los pacientes”, ha apuntado la diputada.

Ante ello, García ha asegurado que el papel del farmacéutico es “imprescindible y fundamental” en el sistema sanitario. Y, en concreto, ha agregado que la pandemia ha puesto de manifiesto la importancia de la farmacia comunitaria. “La red de farmacia comunitaria es un buen sistema a nivel comunitario”, ha indicado.

“Su trabajo más conocido puede ser la dispensación, el control y el seguimiento de productos farmacológicos, pero el papel del farmacéutico es mucho más amplio“, ha expuesto. Así ha enumerado otras tareas que ejercen estos profesionales: “Los farmacéuticos participan en el uso racional de medicamentos, sobre todo, antibióticos; elaboran fórmulas magistrales; colaboran en la detección de reacciones adversas y las notifica, es decir, la farmacovigilancia; o participan en campañas de promoción y prevención, entre otras. Es decir, el farmacéutico comunitario tiene un valor añadido“, ha asegurado.