El Global Madrid | jueves, 12 de diciembre de 2019 h |

Farmaindustria trabaja en la puesta en marcha de un plan específico para fomentar en España los procesos de innovación incremental de los medicamentos, debido a las dificultades que encuentran para su desarrollo y explotación en nuestro país. Así lo ha anunciado este jueves Emili Esteve, director del Departamento Técnico de Farmaindustria, durante una jornada sobre innovación incremental organizada por Farmaindustria y celebrada en la Real Academia de Medicina de Cataluña, en Barcelona.

“Hay casos en los que, a pesar de su interés para pacientes y profesionales sanitarios, además de la inversión realizada en el desarrollo clínico y de su aportación adicional en términos de eficacia o ahorro, la innovación incorporada queda sin reconocimiento al ser equiparada por el Sistema de precios de referencia a presentaciones clásicas, simplemente por compartir el mismo principio activo”, explicó Esteve.

La innovación incremental abarca mejoras en medicamentos ya comercializados que van desde nuevas vías de administración a la combinación de dos principios activos para un uso más eficaz, la búsqueda indicaciones o mejoras en la seguridad o posología. Algunos ejemplos son la polipíldora cardiovascular, una reformulación de un antifúngico que consigue los mismos efectos con la mitad de la dosis, un dispositivo tecnológico que permite al paciente con Parkinson tomarse la cantidad de medicación correcta a la hora adecuada, una pluma precargada para administrarse uno mismo la solución de adrenalina en caso de una reacción alérgica grave o la combinación de dos analgésicos en un solo comprimido para mejorar la adherencia al tratamiento contra el dolor.

Con el fin de conseguir un mayor reconocimiento a esta innovación, uno de los puntos de la propuesta de Farmaindustria será una modificación de la regulación actual “que permita que cierta innovación incremental pueda ser calificada de interés para el SNS y, en consecuencia, no quede atrapada por el Sistema de precios de referencia”, señaló Esteve. “Esta calificación de interés para el SNS también podría ser aplicable a otros medicamentos en riesgo de desaparecer del mercado”.

En el citado plan también se solicitará una mayor participación de los profesionales sanitarios y de los representantes de los pacientes en los procesos de precio y financiación de los medicamentos, “para que trasladen su visión acerca de las ventajas que suponen estas innovaciones, aspectos hasta ahora poco tenidos en cuenta”, defiende el director del Departamento Técnico de Farmaindustria. “Es crucial que en la evaluación se incluya información sobre la experiencia de uso del producto, que se incorpore información adicional del fármaco tras su lanzamiento -de forma que permita reevaluarlo- y que en la fijación del precio se estime mejor el valor global que aporta”.

Por otra parte, “esta innovación es una buena opción para determinadas compañías de pequeño y mediano tamaño, y genera competencia y mejoras sobre los productos existentes”, añadió Esteve. En este sentido, el vicepresidente de Farmaindustria Juan Carlos Aguilera enfatizó en el encuentro en Barcelona la importancia que tiene para Farmaindustria esta iniciativa, que cuenta con el respaldo de compañías pertenecientes a todos los grupos estatutarios de la Asociación, con las consecuencias que esto tiene tanto para los pacientes como para el conjunto de la sociedad, en virtud del tejido investigador y productivo que se genera alrededor.

Pequeñas mejoras, grandes soluciones para el paciente

Ana Pérez Velamazán, directora de Consultoría de IQVIA España, destacó los principales puntos de un reciente estudio elaborado por la consultora, por encargo de la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia), en el que se refleja las diferencias que reguladores y pagadores tienen en la percepción del valor añadido que ofrece la innovación incremental. Según recoge este informe, médicos y pacientes reconocen la notable aportación terapéutica de estas innovaciones y las sitúan al mismo nivel en términos de valor añadido que a los fármacos que presentan mecanismos de acción completamente nuevos; en cambio, gestores sanitarios, mientras sí reconocen el valor añadido a los medicamentos radicalmente innovadores, se resisten a hacerlo con las distintas fórmulas de mejora que se agrupan bajo el concepto de innovación incremental.

La jornada fue inaugurada por el presidente de la Real Academia de Medicina de Cataluña (RAMC), Josep Antoni Bombí; el expresidente de Farmaindustria y actual académico de la RAMC Antoni Esteve y por el vicepresidente de Farmaindustria Juan Carlos Aguilera. También participó César Hernández, jefe del Departamento de Medicamentos Humanos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que explicó el trabajo que en materia de reposicionamiento de medicamentos se está realizando en la Unión Europea.

Además, representantes de dos compañías farmacéuticas, Joan Heras, de Boehringer Ingelheim, y Mireia Delgado, de Leo Pharma, expusieron las ventajas de esta innovación a través de ejemplos de desarrollos propios.