El Global Madrid | martes, 11 de diciembre de 2018 h |

El SNS está altamente descentralizado y regionalizado en su proceso de toma de decisión y permite observar que no hay una única fórmula de afrontar el acceso de la innovación. Por ello, el VI Seminario sobre gestión para directivos, bajo el título Innovación y sostenibilidad. ¿Son los resultados en salud la respuesta?, organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) y la biofarmacéutica UCB, que se ha celebrado en Barcelona, ha compartido experiencias nacionales e internacionales sobre la incorporación de innovación. El factor de éxito común en todas ellas es la capacidad de los equipos a definir una estrategia integral que permita orientar la innovación al resultado a través de un proceso dinámico que combina la evaluación, la compra con inteligencia y la gestión de la utilización. Por ello la compra pública de bienes y servicios, se convierte en una herramienta clave de gestión, que permite orientar los recursos a los objetivos estratégicos, trasladar la información relevante a los agentes implicados y facilitar de forma eficiente y oportuna el desarrollo e incorporación de la innovación útil para el sistema sanitario y la sociedad.
Esta edición del seminario ha explorado las experiencias centradas en el entorno de Cataluña. En el acto inaugural, Emilio Lora-Tamayo, rector de la UIMP y presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas; Francesc Iglesias, adjunto a la Dirección del Institut Català de la Salut; Josep Torrent-Farnell, director de l´Àrea del Medicament (Generalitat de Catalunya); y Olga Espallardo, directora de Relaciones Institucionales UCB. Todos ellos resaltaron la necesidad de situar la medición de resultados como eje central del sistema e idioma común entre los agentes del sistema.

En este sentido, César Velasco, director de l´Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya (AQuAS), subrayó que el nuevo paradigma que estamos viviendo nos obliga a evaluar si la innovación es incremental o disruptiva y sistémica. Asimismo, señaló que estamos sufriendo una transformación pasando de la era de la programación a la era de la inteligencia artificial y big data. Lo que nos obliga a reflexionar y diferenciar las políticas Pull de las políticas Push. “Adoptar la innovación supone adquirir medicamentos innovadores que cuenten con una validación clínica, lo que supone innovar también en los procesos”, señaló. En este escenario, sostuvo que el nuevo modelo sostenible de innovación debe contemplar la desinversión en lo que no aporta valor, para poder establecer nuevos modelos de pago, y establecer un sistema de compra pública de innovación asistencial, organizacional, centrada en el paciente y que, además, sea ética, eficiente y sostenible.

Por su parte, Toni Gilabert, director del Área de Farmacia y del Medicamento del Consorcio de Salud y Social de Catalunya (CSC), explicó lo que podría ser la fórmula para implantar un modelo innovador de compra de medicamentos y concluyó que “orientarse a resultados es una necesidad que requiere medir datos en vida real previo a escuchar al entorno: pacientes, profesionales, mercado…”. Y es que la medición de resultados incorporando la opinión de los agentes activos como el paciente es esencial a la hora de tomar decisiones clínicas.

Joan Miguel Nolla, jefe del servicio de reumatología del Hospital Universitario de Bellvitge, aportó la visión de los clínicos y su experiencia en un piloto sobre pago por resultados en salud donde se incorpora la medición de los resultados en salud de los pacientes como novedad metodológica. “Necesitamos una herramienta como la medición de resultados en salud de los pacientes, que aunque tiene limitaciones captura la opinión del paciente y nos ayude en la toma de decisión clínica y en la toma de decisión más global que nos permita tomar decisiones que ayuden a la sostenibilidad”, indicó.

Ana Clopes, directora de Apoyo a la Asistencia del ICS y directora de Política del Medicamento del ICO, compartió el proceso que han implementado para la incorporación de medicamentos y señaló que “la experiencia del ICO ha cambiado la relación con la industria y esta no se realizó por estrategia de ahorro, sino por estrategia de comparar por valor y tener resultados que lo certifiquen dentro de un marco estratégico definido”.