Las patronales de oficinas de farmacia consideran que en estos momentos es inviable y es un “brindis al sol”

El Ministerio de Sanidad no rechaza establecer de una cartera de servicios, siempre que no tenga costes adicionales

| 2010-09-24T16:53:00+02:00 h |

redacción

Barcelona

El “histórico” acuerdo alcanzado entre el Consejo Autonómico de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña y la Consejería de Salud de esta comunidad autónoma para establecer una cartera de servicios remunerada para las oficinas de farmacia parece haber chocado con dos piedras. Y es que, a pesar de la euforia inicial de los colegios catalanes por haber alcanzado este compromiso, el documento firmado el pasado 26 de julio por el presidente de los farmacéuticos catalanes, Jordi de Dalmases, deja dudas sobre la posibilidad de que se pueda poner en práctica. Más si cabe cuando, en el documento firmado, únicamente se recoge el procedimiento a seguir para implantar estos nuevos servicios y se deja en el alero la fijación de la futura remuneración económica.

En este sentido, el económico, el que se haga realidad este acuerdo cuenta con la desconfianza de los propios farmacéuticos, que recelan de un acuerdo en el que no se fijan retribuciones concretas por los servicios a prestar. Desde la patronal de oficinas de farmacia Fenofar, su presidenta, Pilar Navajas, calificó el acuerdo como “un brindis al sol”. Y es que, para ella, es una “irresponsabilidad” querer establecer una cartera de servicios que difícilmente puede ser remunerada en estos momentos.

Para Navajas, con el establecimiento de una cartera de servicios “de arriba a abajo” se corre el riesgo de que los farmacéuticos tengan que asumir la prestación de una serie de servicios que ellos no han pedido desarrollar, sobre todo “si no sabemos si se remunerarán, cuánto será esa remuneración…”.

La misma opinión se tiene en la patronal estatal de oficinas de farmacia FEFE. A este respecto, su presidente, Fernando Redondo, que ya se ha mostrado en repetidas ocasiones en contra del establecimiento de carteras de servicio en un momento de crisis como el actual, coincidió en que se trataba “de un brindis al sol”.

En este sentido, Redondo precisó que tras la aprobación de los últimos RDL, con los que el Gobierno ha dado un ‘tijeretazo’ al gasto farmacéutico y que han puesto en “serias dificultades” a las oficinas de farmacia, “más que crear una cartera de servicios se podría decir que habrá muchos servicios que actualmente presta la farmacia que deberán desaparecer”. Y es que, según él, “no es lógico que primero te recorten para luego remunerarte”.

De otro modo, desde Fenofar se denuncia que el anuncio de establecer una cartera de servicios remunerada “confunde a la ciudadanía, que cree que se va a encontrar en las farmacias con unos servicios que, ahora mismo, no podemos dar por razones económicas”. Una confusión que, según estima, podría estar vinculada con la proximidad de las elecciones autonómicas. “En la farmacia somos unos ingenuos, nos seguimos creyendo todo”, indicó.

Sin costes adicionales

Por otro, la ‘cartera de servicios de Dalmases’ chocaría con los postulados repetidos en numerosas ocasiones desde el propio Ministerio de Sanidad. Y es que, los responsables de la sanidad española no ven con malos ojos el establecimiento de una cartera de servicios (incluso a nivel nacional), eso sí, siempre apostillan que estarían dispuestos a ello siempre que no suponga un mayor coste para el sistema.

A este respecto, y a pesar de que la decisión de establecer esa cartera de servicios depende de la Generalitat, al tener transferidas las competencias, es complicado vislumbrar en estos momentos debido a las dificultades económicas por las que atraviesan las arcas autonómicas, incluida Cataluña, que ya ha tenido problemas para hacer frente al pago de recetas.