El 76 por ciento de la población considera que a las farmacias “se les debería haber dejado tener una participación más activa en la gestión de esta pandemia”, así como que las boticas son los establecimientos “donde hay menor grado de contagio de COVID-19” en comparación con múltiples espacios como restaurantes, mercados de barrio, tiendas especializadas, centros educativos o de trabajo, bancos, hoteles… Estos son algunos de los principales resultados de la ‘Encuesta FLASH-BIS (Barómetro de Intereses Sanitarios) elaborada con motivo del primer aniversario de la irrupción de la pandemia (marzo 2021).

Un sondeo en el que han participado más de 1.600 ciudadanos de toda España (realizada en marzo de 2021) con una edad media de 46,9 años —con paridad entre hombres y mujeres— y de los cuales el 45,7 por ciento eran pacientes de grupos de riesgo (consultar ficha técnica al final de la información).

Junto a la visión del papel de las farmacias en esta pandemia, esta encuesta también ha recopilado importantes percepciones de la sociedad en torno a esta crisis como serían sus efectos en la sociedad y sistema sanitario, su propia salud y cambios en hábitos de vida, la gestión realizada por las Administraciones, así como su confianza en torno a las vacunas y la campaña de inmunización a la población. También, respecto a la percepción sobre la industria farmacéutica en esta crisis: la imagen es mas positiva que negativa tras los meses de pandemia y su implicación en la investigación en vacunas y medicamentos frente a la COVID-19 se sitúa en un 7 sobre 10.

Fuente: Encuesta FLASH-BIS (marzo 2021)

En líneas generales, el 98 por ciento de los encuestados manifiesta que la pandemia ha empeorado la atención sanitaria al conjunto de enfermos, si bien un 37 por ciento lo considera “normal” debido a la falta de recursos y la excepcionalidad de la situación. De igual manera, un 62 por ciento hace ver su “máxima preocupación” por los efectos de la crisis de la COVID-19 en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Respecto a las consecuencias sanitarias individuales, el 46 por ciento indica “preocupación máxima” por los efectos en la salud en general, siendo el ámbito de la salud mental el más señalado (por preocupante) por los participantes.

Acceso a los tratamientos

Fuente: Encuesta FLASH-BIS (marzo 2021).

Por ejemplo, en otra de las áreas consultadas en este Barómetro de Salud de afectación a las farmacias, como es el caso del consumo y acceso de los pacientes a sus tratamientos, el 73 por ciento de participantes indica “haber mantenido” su administración habitual de fármacos en el último año, mientras que un 20,5 lo habría aumentado. Apenas un 6,5 por ciento considera que ha tomado menos medicamentos desde la expansión del coronavirus en nuestro país. La encuesta también refleja un notable aumento de la adquisición de medicamentos OTC y productos sanitarios por el canal legal en Internet.

Mientras, la práctica totalidad de la sociedad (94 por ciento) es partidaria de establecer medidas que durante esta crisis faciliten el acceso a sus tratamientos a los pacientes crónicos. Así ocurre ya con iniciativas ya emprendidas —reflejadas por los propios encuestados— como la renovación automática a través de los sistemas de receta electrónica, la suspensión temporal de visados para ciertas terapias y el envío de medicamentos hospitalarios a domicilios (telefarmacia) o farmacias de referencia a pacientes externos a fin de evitar las visitas a estos centros. De manera especial, respecto a pacientes vulnerables. No obstante, el 71% considera que este tipo de medidas se deberían tomar de forma coordinada entre el Gobierno de España y los autonómicos.

Percepción de las vacunas

El Flash-BIS (Barómetro de Intereses en Salud) también aborda un asunto de mera actualidad como son las vacunas de la COVID-19. Aunque el 9,3 por ciento de los encuestados en este barómetro ya han sido inmunizados (una cifra similar a la que reflejan actualmente las estadísticas de la campaña nacional), el 77,2 por ciento de los que no lo están manifiestan su plena disposición a hacerlo. Un 12,2 por ciento no lo haría mientras que un restante 10,6 por ciento mantiene dudas al respecto (no sabe/no contesta).

Fuente: Encuesta FLASH-BIS (marzo 2021)

Este sondeo también recoge una cuestión en pleno auge en los debates públicos. ¿Debe ser obligatoria la vacunación frente a la COVID-19? La mayoría de encuestados (63,7 por ciento) considera que no debe ser obligatorio vacunarse frente al SARS-CoV-2, frente al 31,2 por ciento que sí lo estima como una exigencia ineludible. De estos últimos, se imponen aquellos que consideran que debe aplicarse esta obligación “para todo el mundo”, mientras que un grupo más reducido lo aplicaría únicamente “para determinados grupos de riesgo y personal sanitario”.

Gestión de la pandemia

¿Han gestionado de forma óptima las Administraciones Publicas la crisis de la Covid-19? En el balance general, la sociedad otorga lo que puede considerarse un “aprobado raspado”: 5,45 de nota media.

El 76,3 por ciento consideraría “adecuado” que se estableciese un organismo independiente que pudiese realizar una valoración sobre la gestión realizada por las Administraciones

En la valoración individual, los ciudadanos consideran que se ha abordado mejor esta crisis desde el ámbito autonómico que el nacional. En concreto, un 61 por ciento aprueban —consideración regular, buena o muy buena— la labor realizada por su Gobierno autonómico, mientras que solo un 49 por ciento opina de la misma manera respecto a las decisiones emanadas desde el Ejecutivo central.

Otro dato a destacar es la coincidencia de los resultados de este sondeo con las peticiones de expertos de la comunidad política y científica. Y es que el 76,3 por ciento consideraría “adecuado” que se estableciese un organismo independiente que pudiese realizar una valoración sobre la gestión realizada por las Administraciones.