Mercedes Jabalera, Hospital San Joan de Deu

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| viernes, 29 de noviembre de 2019 h |

La responsable de Calidad del Hospital San Joan de Deu, en Barcelona, Mercedes Jabalera, analiza logros y asignaturas pendientes en la humanización de la atención sanitaria infantil en los centros nacionales e internacionales.

Pregunta. Si la humanización es una necesidad en la atención sanitaria, parece más necesaria aún cuando se habla de niños…

Respuesta. Así es, porque, además, cuando el niño se pone enfermo, también enferma su familia. Por lo tanto, en el hospital tenemos que empezar por iniciar estrategias para poder dar soporte desde el punto de vista humano a los pacientes, tanto a los niños como a sus familiares. Es algo imprescindible. Hemos de hacer también que los niños entiendan lo que significa estar hospitalizado y haberlos extraído de su juego y de su colegio. Es algo muy necesario.

P. ¿En qué punto están los hospitales españoles en este sentido?

R. Los hospitales a nivel de estructura y arquitectura han avanzado porque todo el mundo entiende que los hospitales tienen que ser más amables. Incluyen salas de juego, colores, servicios de soporte o saben tratar el dolor. Es importante informar al paciente y la familia en un lenguaje que entiendan, los temas de comunicación y lo que llamamos el toque humano. Hemos avanzado en muchos frentes, pero nos quedan cosas aún. A nivel de toma de decisiones y participación en procesos asistenciales hay que cambiar la cultura aún. Si pensamos en España, vemos que otros países nos llevan mucha ventaja. Todavía nos queda camino.

P. ¿Hay muchas diferencias entre comunidades autónomas?

R. No sé si las diferencias están entre comunidades o entre culturas, porque cada vez lo que tenemos es más movimiento de personas a través de los países. Creo que todos nos enfrentamos más a ese movimiento que a pacientes que vienen de la Comunidad de Madrid, Andalucía o Cataluña. En un mismo hospital lo que hay son personas o pacientes con distintas culturas: personas chinas, rusas, árabes… Este reto, además, es un reto que compartimos a nivel internacional.

P. ¿En qué experiencias internacionales puede inspirarse el Sistema Nacional de Salud?

R. Me gustan las experiencias americanas, que evidentemente tienen modelos de financiación muy distintos, para enfocar esta estrategia. Cómo nos comunicamos con los pacientes, cómo somos empáticos y llegamos a ellos, desde el director gerente hasta el voluntario. Es un tema muy relevante. Es importante poner en marcha un plan de formación para fomentar esta comunicación empática y compasiva. El resto está muy relacionado con la dotación de recursos.

P. En países en vías de desarrollo el recorrido es inmenso, ¿por dónde se puede empezar?

R. Los temas de comunicación se pueden trabajar siempre. La comunicación y la formación se puede hacer con temas online o presencial, se puede ir articulando esto para que no sea tan costoso. La comunicación es algo trasversal y global que se puede utilizar. El tema de hacer los espacios más amables es factible con grandes proyectos de obras muy costosos o también con la participación de la gente, poniendo, por ejemplo, dibujos de los pacientes y las familias. Hacer amable un espacio y comunicar no es difícil ni costoso, está al alcance de todos.


En nuestro país, más que entre comunidades autónomas, la diferencia está entre culturas