El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha se compromete a responder esta semana por el impago de mayo
Los boticarios no pueden seguir subvencionando a la administración y confían en cobrar una factura el día 20
irene fernández
Toledo
Tampoco se produjo el pago, pero al menos hubo reunión. La semana pasada el nuevo consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, recibió finalmente a los miembros del Consejo Regional de Farmacéuticos de la región, así como a los de la Federación de Empresarios Farmacéuticos de Castilla-La Mancha (Fefcam), para abordar la situación de las farmacias tras el impago de la factura del mes de mayo. Intención de saldar la deuda existe, según aseguraron los boticarios castellano-manchegos, ya que el consejero se ha comprometido a estudiar la “crítica situación” y contactar con la Consejería de Hacienda para conocer su capacidad económica. Pero hasta el 19 de julio no dará una respuesta a los colegios de farmacéuticos, que esperan que salde la deuda para evitar desabastecimientos.
Una vez la consejería informe del plan de pagos, en caso de que la administración decida liquidar las facturas de mayo, éste se hará efectivo de forma inmediata el 20 de julio. De momento, la deuda de la consejería a las oficinas de farmacia asciende ya a cerca de 50 millones de euros y afectaría a las 1.300 boticas de la comunidad, según datos de Fefcam.
“Nos comunicaron que tienen un problema grave de tesorería, también en otras consejerías, pero que el tema social sanitario es prioritario. No contemplamos la opción de que no nos paguen, porque las farmacias no podemos subvencionar a la administración”, apuntó José Muñana, presidente del COF de Guadalajara. En caso de impago alertó de que se produciría “un detrimento del servicio, desabastecimientos y un problema muy grave”.
Los farmacéuticos esperan que al menos el departamento que dirige Echániz pague una factura, ya que el 20 de julio adeudará dos, la de mayo y junio. “Lo normal sería que lo regularizaran, pero al menos que hagan un pago, porque la farmacia ya no aguanta más”, manifestó Muñana.
Por su parte, Echániz se mostró “consternado” al encontrarse sin fondos en los presupuestos asignados a su propia consejería. Debido a la congelación del pago a las farmacias por el anterior gobierno, los boticarios han hecho frente a la factura de mayo gracias a diversos convenios con entidades bancarias, distintos en cada COF. Unos convenios cuya cobertura, en la mayoría de los casos, no supera los 20 días tras el impago.
