Juan Pablo Ramírez Madrid | viernes, 19 de enero de 2018 h |

Los hospitales privados reclaman un espacio en la atención de los flujos pacientes europeos dentro del marco de la directiva europea de sanidad transfronteriza. La secretaria general de la Unión Europea de Hospitales Privados (UEHP, por sus siglas en inglés), Ilaria Giannico, subrayó que pueden jugar un papel destacado en la reducción de las listas de espera, en la superación de las rígidas diferencias entre los sistemas nacionales de salud del continente y en el desarrollo de estándares de calidad, durante la celebración de Fitur Salud la semana pasada.

El clúster Spaincares junto a una serie de empresas como Asisa, HLA, Grupo Asisa o Quironsalud vienen ocupando en los últimos años un espacio en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid para promocionar España como destino turístico sanitario. Precisamente esta directiva europea supone una oportunidad no solo para los hospitales privados españoles sino también para los europeos.

Giannico argumentó que el objetivo de la directiva europea es permitir el acceso de los ciudadanos europeos a la atención sanitario en otros países. Con este fin, la norma propone la creación de una red de puntos nacionales de contacto que faciliten información sobre sanidad transfronteriza, el desarrollo de una prescripción médica interconectada entre todos los países de la Unión Europea y la puesta en marcha de las Redes Europeas de Referencia, una tarea en la que ya participan los principales hospitales europeos. De momento han comenzado sus trabajos 23 redes. Sin ir más lejos, el Hospital La Paz liderará Transchild, la red de atención pediátrica.

Los hospitales privados han encontrado una serie de obstáculos para entrar a formar parte de este proceso. El escaso conocimiento de los pacientes europeos sobre sus derechos, la falta de información estructurada para los usuarios interesados en la atención sanitaria en el extranjero, un sector privado apenas involucrado, poca cooperación y comunicación entre el Ministerio de Sanidad y los puntos de nacionales de contacto, la carga administrativa y el escaso tiempo para responder a los requerimientos, barreras de lenguaje, bajas tarifas de reembolso y las divergencias existente entre las guías clínicas entre los diferentes países de la Unión Europea son algunos de los frenos a los que aludió Giannico durante su presentación.

El caso de España

La secretaria general de la UEHP destacó la participación de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) en las conversaciones iniciales para la trasposición de la normativa europea. Giannico subrayó que la información disponible en el Ministerio de Sanidad sobre los derechos de los pacientes es muy completa.

“Es una directiva que no se ha desarrollado bien en España, creo que fundamentalmente por falta de información. No hemos sabido hincarle el diente”, señaló David Medina, presidente de Spaincares. El flujo de pacientes europeos supone una oportunidad para el sector privado, pero existen dificultades. “No hemos sabido aclararnos con el Ministerio. Probablemente es culpa de ambos”. La sanidad privada ofrecería, bajo su punto de vista, una solución a cuestiones como las listas de espera.

EL DATO

El turismo de salud podría generar en España alrededor de 500 millones de euros, según las estimaciones del clúster Spaincares. “Estamos trabajando para que España sea una referencia internacional del turismo de salud en los próximos años sobre la base de la alta demanda turística y una calidad y servicio sanitario excelentes”, explicó David Medina, presidente de esta organización.

Medina subrayó que esta cifra podría incrementarse de manera exponencial en los próximos años si la sanidad privada comenzara a asumir su papel dentro de la directiva europea de sanidad transfronteriza. “El problema del turismo de salud es que no está medido. Es difícil distinguir si un paciente viene a España para ser tratado o le ha ocurrido algo mientras estaba aquí. No tenemos un dato de flujo de pacientes”, subrayó Medina.