La Organización Nacional de Trasplantes y las comunidades autónomas trabajan en un plan específico post-Covid para recuperar la actividad previa a la crisis sanitaria lo antes posible. Así lo ha asegurado en el Congreso el ministro de Sanidad. Salvador Illa ha subrayado además que el objetivo es hacerlo “en las mejores condiciones de seguridad para la salud de los pacientes y los profesionales”.
Los trasplantes es una de las actividades sanitarias que se ha mantenido como actividad esencial durante la fase aguda de la epidemia. A pesar de la tensión que ha sufrido el SNS, España ha logrado realizar 274 trasplantes de órganos de 127 donantes desde el 13 marzo hasta el 19 de mayo.
En los momentos más críticos se ha priorizado a los pacientes en situación clínica muy grave para los que el trasplante no puede esperar. Son los casos denominados de ‘Urgencia Cero’, ha explicado Illa. También aquellos pacientes “difíciles de trasplantar” por sus características —inmunológicas o de otro tipo— en caso de aparecer un donante idóneo.
Los trasplantes, en el contexto de la reorganización del SNS
En este sentido, 25 de los trasplantes realizados han sido infantiles y 30 de los pacientes estaban en urgencia Cero. “Si bien el número de trasplantes en la crisis se ha reducido durante la crisis en comparación con la actividad habitual en el SNS, cada uno de los realizados se ha hecho en condiciones de extraordinaria complejidad”, ha dicho Illa.
Los trasplantes son un ejemplo importante e ilustrativo de una realidad mucho más amplia. El SNS ha iniciado el camino para recuperar la actividad una vez superados los momentos de más tensión en la respuesta frente a la Covid-19. Toca adaptar el sistema para cuidar de la salud de la población conviviendo con el coronavirus. Esto significa, para Sanidad, que hay que seguir siendo capaces de tratar la infección, “pero recuperando la atención del resto de problemas de salud que durante la fase aguda de la crisis se han visto relegados por la reorganización urgente del sistema”.
Todas las administraciones e instituciones sanitarias están trabajando para reintroducir progresivamente la asistencia sanitaria habitual. Ello requiere organizar bien los circuitos, escalar la actividad y establecer los protocolos. Como trasfondo, siempre, la máxima garantía de seguridad tanto para pacientes como para profesionales sanitarios. “Así, por ejemplo, se considera esencial reintroducir de forma escalonada la cirugía programada, ya que el retraso de una cirugía puede condicionar el pronóstico de algunas enfermedades”, ha matizado el ministro.
Una guía para los protocolos hospitalarios
En los últimos días, de hecho, Sanidad ha dado a conocer el resultado del trabajo técnico realizado bajo su coordinación por expertos de sociedades científicas y profesionales. Se trata del documento titulado ‘Recomendaciones para la programación de cirugía en condiciones de seguridad durante el periodo de transición de la pandemia de Covid-19’, dirigido a guiar a los hospitales en el desarrollo de protocolos.
El documento recoge, entre otras cosas, la necesidad de crear circuitos no Covid-19, recomendaciones para reducir las consultas presenciales y restringir el número de visitantes o cómo evaluar que los pacientes no tienen infección activa justo antes de una cirugía.
Illa anuncia un proyecto para fabricar un total de 100 millones de mascarillas higiénicas
Diferentes departamentos del Ejecutivo, en especial el Ministerio de Industria, en colaboración con empresas del sector texto, han desarrollado normas UNE para regular las características técnicas y de seguridad de las mascarillas higiénicas. Son estas mascarillas las que ahora tomarán más protagonismo en la población debido a su uso obligatorio cuando no sea posible mantener la distancia interpersonal de 2 metros.
Ya existe oferta en el mercado de estos productos, asegura Sanidad, pero otros, incluyendo sectores como el de la moda se están sumando a su fabricación. En este sentido, el ministro Illa ha anunciado ante la Comisión de Sanidad del Congreso que “importantes empresas textiles están desarrollando un proyecto para fabricar un total de 100 millones de mascarillas higiénicas”.
De forma inminente, ha añadido Illa, la semana que viene “se iniciaría la producción de 5 millones de mascarillas, que llegarían a los 10 millones por semana una vez se estabilizara la producción”. Estas mascarillas serán distribuidas a través de grandes superficies comerciales y establecimientos de distintas compañías. Igualmente, estas empresas tienen previsto realizar una distribución de mascarillas reutilizables a través de los canales farmacéuticos a principios de junio.