La Comisión de Salud de Navarra aprobó la semana pasada por unanimidad una resolución por la que se insta al Gobierno regional a “aplicar la financiación pública de los sistemas de monitorización continua y flash de glucosa para las indicaciones adoptadas por acuerdo del Consejo Interterritorial del SNS en abril de 2018, para su incorporación en la cartera común de servicios del SNS”.
La resolución incita al Gobierno a “utilizar criterios de evaluación de las tecnologías sanitarias que resulten más costo-eficientes, contando con la opinión de nuestros profesionales sanitarios”.
En la resolución también se solicita “realizar formación específica sobre su utilización a los profesionales sanitarios de Atención Especializada y Primaria del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea, e incluirlos en de las Guías de Práctica Clínica o Vías Clínicas de Navarra”.
Con esta resolución, los grupos parlamentarios coinciden en que, sin estos dispositivos, los diabéticos sufren “complicaciones crónicas y pérdida de calidad de vida”. Estos sistemas permiten un tratamiento mucho más “preciso y seguro, sencillo e indoloro”.
A ese respecto, “el control óptimo y continuo de la glucemia es un factor clave para la prevención del avance de la enfermedad y sus complicaciones sobre órganos diana, así como para evitar urgencias diabéticas”, cuestión que también incide sobre los costes directos de la diabetes, que ascienden a “5.809 millones de euros anuales (un 8,2 por ciento del presupuesto sanitario).
