J. R-T. / C. B. Rodríguez Madrid | viernes, 10 de febrero de 2017 h |

La ministra de Sanidad cumple cien días. Se trata de ese periodo bautizado como de cortesía en el que a un nuevo titular se le exige que muestre la ruta de sus políticas. Sin embargo, para Dolors Montserrat no ha sido tan sencillo como pudiera parecer. Si bien el sector sanitario (farmacia, industria, distribución y pacientes) tiene buenas sensaciones de lo que puede deparar su estancia en el Ministerio, la situación política no permite descansos. Montserrat no ha logrado meterse al Congreso de los Diputados en el bolsillo. En el Senado tampoco, pero la mayoría absoluta del Partido Popular en esa cámara difumina la confrontación. Montserrat llegó con un discurso marcado por la petición de consenso que no ha llegado a producirse por dos motivos: la lucha por ejercer la oposición y la negativa a enmendar ciertas políticas del Ejecutivo del Partido Popular.

El portavoz de la Comisión de Sanidad del Partido Socialista en el Congreso, Jesús María Fernández, lamenta que estos primeros cien días de la ministra no hayan sido aprovechados. “Todavía no sabemos qué proyecto sanitario propone. Su comparecencia fue decepcionante en cuanto a que habló de desafíos pero no de cómo piensa abordarlos”, explica. Además, critica la falta de iniciativa para con las comunidades autónomas. “Cien días después sigue sin tomar la iniciativa de reunirse con los consejeros y convocar urgentemente el Consejo Interterritorial para abordar temas urgentes como la financiación sanitaria en el marco del Sistema de Financiación Autonómica”, afirma. En este contexto, según ha podido saber EG, Montserrat se ha reunido con los consejeros de comunidades ‘populares’ y esta semana contactaría con Cataluña y Aragón.


La oposición le critica que sus apelaciones al consenso y al diálogo no se traducen en el acuerdo de medidas concretas


Fernández también rechaza las palabras de consenso de la ministra porque, explica, no se concretan. “Sigue apelando al diálogo pero sigue sin aceptar ni hablar con el PSOE sobre las ocho medidas urgentes para acordar en el debate de su comparecencia”, señala el portavoz quien, además, critica que “por no cerrar parece que no ha cerrado ni siquiera su equipo directivo sanitario”.

Desde Podemos, la crítica también es severa. Aunque la portavoz de la Comisión de Sanidad, Marta Sibina, agradece que se “muestre dispuesta “ a comparecer en sede parlamentaria “al contrario que sus predecesores”, la diputada morada lamenta el bagaje de estos cien días. “Sabíamos que se trataba de una ministra sin conocimiento específico de los temas fundamentales. No sabe hacia dónde va a caminar el Ministerio y sigue repitiendo los mantras del Partido Popular, tratando de vestir el Real Decreto-ley 16/2012 de universalidad, gratuidad y calidad cuando fue un atentado contra el sistema sanitario público”, argumenta.

En resumen, Sibina afirma que estos cien días han caído en saco roto. “Sigue sin mostrar propósitos de universalización de la atención sanitaria, sin mostrar una clara estrategia sobre desigualdades sociales en salud y sin abordar una Ley General de Salud Pública que lleva seis años parada a la espera de que alguien la aplique”, dice. Además, lamenta que no haya aún un plan “para abordar cómo vamos a financiar las innovaciones disruptivas sin poner en riesgo el sistema sanitario… En definitiva, cien días sin que sepamos aún hacia dónde quiere ir la ministra”, finaliza.


La ministra se ha reunido en sus primeros cien días con casi todos los agentes del sector para conocer sus pretensiones


Ciudadanos, socio de investidura del Partido Popular, ya tuvo un primer contacto con Montserrat durante aquellas negociaciones de agosto que culminaron con el sí a Rajoy. “En estos cien días hemos visto buen talante pero estamos inquietos con la falta de cumplimiento del acuerdo”, asegura Francisco Igea, portavoz de la Comisión de Sanidad por la formación naranja. En concreto, señala el copago como uno de los temas que más ha sorprendido a Ciudadanos. “Nos preocupa este tema por la falta de análisis riguroso de la realidad. Falta convicción en el Ministerio de Sanidad”, asevera.

Además, el portavoz señaló que, a partir de ahora, le gustaría ver a una ministra más autónoma y segura. “Hace falta alguien al frente que crea que puede cambiar las cosas y no alguien que baje la cabeza cuando Mariano Rajoy dice que cambiar algo es un lío”, resume.

El sector sí confía en su gestión

Desde las patronales de la industria farmacéutica el mensaje es bien distinto. Las palabras son positivas y resaltan el talante demostrado en un primer contacto. “Desde su llegada, ha demostrado gran capacidad de diálogo e interés por hallar soluciones para el SNS a través de la colaboración. Prueba de ello ha sido su protagonismo en la renovación, el pasado diciembre, del Convenio por la Sostenibilidad”, dicen desde Farmaindustria. “En los actos públicos nos ha mostrado cercanía, ganas de conocer nuestro sector e impulsarlo”, comentan desde Aeseg.

También se ha resaltado el talante de Montserrat desde Asebio o Anefp. “Hemos visto signos de buen talante. De capacidad de escuchar. De capacidad de comprender. Y esperamos que estas impresiones se vean corroboradas con las próximas iniciativas que se adopten”, afirman desde la patronal biofarmacéutica, mientras que del sector del Autocuidado resaltan que valoran “positivamente el propósito manifestado por la ministra en repetidas ocasiones de poner en marcha un Pacto por la Sanidad para el que Anefp demanda que el autocuidado tenga un papel primordial”. De oponión similar son en Biosim. La patronal de medicamentos biosimilares asegura que “la ministra está mostrando unas actitudes de receptividad y cercanía a la realidad que nos parecen muy adecuadas para este momento”.

La Farmacia, con quien la ministra compartió velada en los premios Panorama, apunta a que Montserrat ha dado pruebas de entender sus demandas. “La valoración en estos primeros 100 días es positiva y se han abierto importantes vías de colaboración y entendimiento para trabajar conjuntamente por el paciente, para el paciente y con el paciente”, aseguran desde el CGCOF.

Tanto la ditribución como los pacientes son más cautos a la hora de valorar la gestión de Montserrat. “Todavía es prematuro emitir un juicio de valor sobre la labor de la ministra”, aseguran des de la patronal de la distribución, mientras que desde la AGP explican que “ha jugado un papel defensivo; espero que cambie y empiece a ser mucho más activa y trabaje sobre temas que tiene pendientes con los pacientes”, aseveran.