La Comisión Europea ha publicado un documento en el que fija los objetivos a cumplir para combatir el VIH, la hepatitis B y C y la tuberculosis hasta 2030. En él se recoge una visión general de las políticas que se han puesto en marcha desde la Comisión para ayudar a los Estados Miembro a luchar contra estas enfermedades.
Estas patologías suponen un grave riesgo para la población, y normalmente afectan más a las personas pertenecen a colectivos socialmente marginados como pueden ser prisioneros, personas con problemas de adicción a las drogas o indigentes. Además, hay otros grupos que también sufren este estigma como los hombres que mantienen relaciones con otros varones. Por ello, teniendo en cuenta las necesidades de este grupo, desde la Comisión Europea aseguran que hay que poner en marcha medidas específicas que puedan ayudar a reducir la incidencia de estas enfermedades de una manera efectiva.
El documento también hace balance del apoyo que presta la Unión Europea a los Estados Miembro analizando diferentes áreas como la salud pública, investigación, política de medicamentos cooperación y desarrollo, entre otras. También se sugieren buenas prácticas recomendadas para la UE respecto a estas enfermedades como la necesidad de realizar un diagnóstico temprano, promover la realización de las pruebas, aplicar diversas medidas de cuidado de manera específica a las personas que padezcan estas enfermedades, la prevención como tratamiento y la promoción de la salud en general.
La Comisión lanza este documento teniendo en cuenta los puntos tratados en la 22ª Conferencia Internacional sobre el Sida que se ha celebrado en Amsterdam, donde la CE organizó diferentes eventos con el objetivo de dar a conocer y promover los logros conseguidos en esta materia. Esta información también será relevante de cara a la próxima reunión de la Organización de las Naciones Unidas con la tuberculosis como tema central que tendrá lugar en Nueva York durante el próximo mes de septiembre.