En los últimos 14 días, las intervenciones no farmacéuticas frente a la Covid-19 han reducido la transmisión y los incidentes en un 45 por ciento en comparación con el 8 de abril. Pero, según Andrea Ammon, directora del Centro Europeo para la Prevención de Enfermedades (ECDC), aún quedan semanas muy difíciles que harán preciso “gestionar las expectativas” de la población. “Este virus no se va a ir pronto”, ha asegurado ante el Parlamento Europeo.
Para el ECDC, la duración y los efectos de la pandemia aún van a causar estragos, y es preciso que la ciudadanía se prepare mentalmente. Para esta experta, es preciso seguir trasladando que “esto sigue siendo un maratón, no un sprint”, y que “no hay que bajar la guardia”.
Aspectos básicos de la correcta desescalada
Actualmente, el país europeo donde más está aumentando la prevalencia de la Covid-19 es Bulgaria. Además, en los últimos 14 días se han experimentado crecimientos en Polonia, Rumanía y Reino Unido. En el resto las cifras están bajando. “Parece que la oleada de transmisiones ha superado su pico, con descensos en 20 países”, ha destacado Ammon.
Ello refuerza, para el ECDC, la idea de que los Estados miembro de la UE pongan en marcha las respectivas desescaladas en base a seis medidas:
- Una supervisión estricta, sumada a una estrategia adecuada para controlar los indicadores que permiten ver la evolución de la infección y salvaguardar la sostenibilidad de los sistemas sanitarios.
- Aumentar la capacidad de realizar pruebas. Junto a ello, una buena gestión clínica y cuidado de la población de riesgo.
- Asegurar un marco adecuado para la trazabilidad de casos.
- Disponer de una capacidad sanitaria adecuada que permita abordar los casos que surjan. Dicho de otro modo, disponer de suficientes camas de UCI.
- Garantizar que los sistemas sanitarios son capaces de responder a un nuevo brote, si surge.
- Evaluar la respuesta a la Covid-19 en otros territorios para identifica las mejores prácticas. En este mismo apartado, diseñar una buena “estrategia de comunicación de riesgos” para informar e implicar a la opinión pública y a los grupos vulnerables.
