Esther Martín del Campo Madrid | viernes, 27 de abril de 2018 h |

El 8 de mayo se celebra el Día Mundial del Cáncer de Ovario. La Asociación de Afectados por Cáncer de Ovario y Ginecológico (Asaco) está preparando gran cantidad de actividades para celebrarlo, con jornadas en Córdoba (día 5) y en el mismo día ocho en Madrid, Oviedo, Valencia y Zaragoza, además de actividades en Barcelona y Santander.

Pregunta. ¿Cómo ha cambiado la situación de las afectadas desde que comenzó Asaco?

Respuesta. Afortunadamente, en los casi siete años que lleva Asaco ha habido muchos e importantes avances, tanto en la cirugía como en los tratamientos para el cáncer de ovario. Cada vez son más las operaciones realizadas por especialistas en ginecología oncológica y los nuevos tratamientos con medicamentos biológicos abren una puerta al mejor pronóstico de este cáncer.

P. ¿Qué impacto tiene esta patología?

R. En España se diagnostican unos 3.300 casos de cáncer de ovario. En el 80 por ciento de los casos, en un estadio muy avanzado de la enfermedad. Esto se debe a la imposibilidad de realizar un diagnóstico precoz. Los síntomas que se presentan son muy inespecíficos, y persistentes durante más de dos semanas, tales como: hinchazón abdominal, falta de apetito, estreñimiento o diarrea, frecuente necesidad de orinar. La mayoría de las veces, la paciente tiene un largo recorrido hasta el diagnóstico final, pasando por diferentes especialistas. Este retraso agrava enormemente el pronóstico de la enfermedad. La mortalidad alcanza el 60 por ciento. En Europa, mueren al año 42.700 mujeres por esta causa.

P. ¿Cómo afecta a la vida de estas pacientes? ¿Y a su entorno?

R. Además del indudable shock que supone el diagnóstico de un cáncer de este tipo, la cirugía de alta complejidad y los tratamientos de quimioterapia, las pacientes se enfrentan a una menopausia quirúrgica. Esto es un cambio radical, especialmente para las mujeres jóvenes en edad fértil. Su vida en pareja se ve directamente afectada por el impacto directo en su fertilidad y vida sexual.

P. ¿Se contemplan todas estas necesidades en el SNS?

R. Podríamos decir que sí de forma general, aunque no se afronta de forma idéntica en todo el territorio estatal por la ausencia de una normativa general. Además, el acceso a los tratamientos y ensayos clínicos no es el mismo en todas la comunidades autónomas.

Tampoco las cirugías se plantean de forma idónea en todas las comunidades. Es importantísimo que las pacientes pregunten de forma abierta a sus médicos por las características de los centros donde van a ser tratadas.

P. ¿Cuáles son vuestras demandas?

R. Además de dar apoyo a las pacientes y sus allegados, acceso a tratamiento psicológico y terapéutico. Asaco persigue, en primer lugar, dar mayor visibilidad para el cáncer de ovario: que se conozcan sus síntomas y su incidencia. Se considera que esta enfermedad se presenta, normalmente, en mujeres en edad de menopausia, o tras ella; pero cada vez son más los casos en que se manifiesta en mujeres jóvenes.

Es muy importante, también, que los médicos de atención primaria sospechen de la posible existencia de un cáncer de ovario cuando una paciente presenta síntomas como los descritos anteriormente, de forma persistente; esto facilitaría un diagnóstico más temprano con la consiguiente mejoría en el pronóstico. También luchamos para que la cirugía necesaria la lleve a cabo un equipo multidisciplinar, dirigido por un especialista en ginecología oncológica, y en centros hospitalarios con el equipamiento y la experiencia para conseguir una cirugía óptima.