La Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) y la Asociación Española de Medicamentos Biosimilares, (BioSim) han establecido alianzas para la realización, de un estudio sobre mercado de los medicamentos biosimilares en España. El estudio, para el que la EASP ha obtenido los datos al Ministerio de Sanidad del periodo comprendido entre 2016 y 2021, analizará la penetración de los medicamentos Biosimilares realizado en nuestro país. La EASP dirigirá el estudio y contará con otros profesionales de los ámbitos económico, sanitario y de gestión.
Este acuerdo se encuadra en el marco de colaboración entre ambas instituciones, firmado con anterioridad, que establece el objetivo de realizar actividades conjuntas que promuevan el desarrollo del conocimiento en proyectos relacionados con la docencia, investigación y consultoría.
Durante la firma del convenio, Blanca Fernández, directora gerente de la EASP, ha explicado que “el análisis de datos dirigidos a facilitar información que posibilite una toma de decisiones informada por parte de las administraciones sanitarias, es una de las líneas de trabajo de la institución” y ha incidido en que “el rigor y la profesionalidad están garantizados con el equipo que dirige y participa en el estudio”
Para BioSim esta colaboración se alinea con uno de los objetivos fundamentales de la Asociación, que no es otro que generar conocimiento sobre los medicamentos biosimilares y ponerlo a disposición de las organizaciones para mejorar su gestión.
La colaboración con la EASP y, en concreto, el abordaje de este estudio supone un hito importante para la Asociación pues tal y como señala Joaquín Rodrigo, presidente de BioSim, “Este análisis permitirá tener una imagen certera de cómo ha evolucionado el mercado de biosimilares en el SNS, en términos de penetración, competencia, variabilidad de uso, etc.” Y es que, hasta el momento, señala Rodrigo, “la poca información de la que disponemos proviene de informes que de manera tangencial ofrecen algunas cifras aproximadas sobre la adopción de biosimilares en España, pero que en ningún caso abordan de manera directa su análisis. Debemos seguir la estela de otros países europeos que cuentan con informes oficiales e incluso observatorios de utilización”. Por último, añade que “el hecho de que la EASP dirija el estudio y su realización recaiga en reconocidos investigadores, hará del resultado un documento de referencia”.