La defensa de los presupuestos sanitarios en el Senado tuvo como invitado principal el Fondo de Cohesión. El Gobierno ha dedicido recuperar esta partida pero su dotación está lejos de las demandas de la oposición. “3,67 millones de euros es insuficiente para las funciones que son necesarias en materia de cohesión, aunque al menos han reconsiderado y rectificado su política respecto a este tema. Este fondo lleva cinco años desaparecido y se puede hacer un esfuerzo mayor”, dijo el portavoz socialista en la Comisión de Sanidad de la Cámara Alta, José Martínez Olmos. Ante estas críticas, el secretario general de Sanidad, Javier Castrodeza, aseguró que será el Consejo Interterritorial quien “decida en su reunión el incremento de este fondo”. Además, cabe recordar que hace unos días el propio Senado aprobó una moción mediante la cual se instaba el Gobierno a incrementar esta partida.
Una de las fórmulas que baraja el Ministerio de Sanidad y con la que se podrían incrementar los fondos destinados a la cohesión del Sistema Nacional de Salud (SNS) proviene de las aportaciones que hace la industria farmacéutica por volumen de ventas. Castrodeza ya ahondó en esta idea cuando le tocó defender los presupuestos en el Congreso de los Diputados: “estos acuerdos cuando se refieren a políticas de coordinación sanitaria tienen obligado cumplimiento a tenor de la Ley 40/2015 del Régimen Jurídico del Sector Público”, explicó.
Otra de las críticas que sufrió Castrodeza provino de la bancada de Podemos. Concepción Palencia, portavoz en la Comisión de Sanidad por la formación morada, reconoció que las cuentas son superiores a las del año anterior pero lamentó que “siga siendo un presupuesto ridículo”. Asimismo, recriminó que “el Ministerio de Sanidad sea un organismo dependiente del Ministerio de Hacienda”. El secretario general de Sanidad instó a la senadora a atender’ a la Conferencias de Presidentes “porque es un seno donde hay una buena oportunidad para mejorar la financiación”.
Desde el Partido Popular, el senador Antonio Alarcó, instó al resto de grupos a “dejar de hacer política con la sanidad y sí políticas sanitarias” con el objetivo de acabar sellando un pacto por la Sanidad. Sin embargo, desde la oposición enfriaron esta posibilidad —como ya ocurrió hace unos días en el Congreso de los Diputados— y recriminaron la falta de autocrítica a las políticas del Partido Popular y sus consecuencias en los PGE.
