Carlos B. Rodríguez Madrid | miércoles, 21 de noviembre de 2018 h |

Castilla-La Mancha está trabajando mucho con las farmacias desde el punto de vista de la educación para la salud y la Consejería de Sanidad considera que ese debe ser el camino a seguir. “No hemos dado el siguiente salto, ni está en la hoja de ruta”. Con estas palabras cerró Jesús Fernández Sanz, consejero de Sanidad regional, la posibilidad de abordar en la región, junto con la farmacia comunitaria, una apuesta similar a la que la Consejería de Sanidad de Madrid plantea en su Ley de Farmacia, actualmente en fase de tramitación parlamentaria.

Pese a todo, Fernández reconoció, durante su paso por los desayunos socio-sanitarios que organiza Europa Press, el paso dado por “comunidades autónomas valientes”, como es el caso de Madrid. A su juicio, “cualquier iniciativa que tenga que ver con cambiar el rol de los profesionales es importante”, y en el caso de los farmacéuticos, reconoció que en ocasiones, son “el único agente de salud activo que hay” en algunas zonas rurales. En este sentido, instó a “no preocuparse gremialmente” por lo que pueda ocurrir, siempre que las actuaciones funcionen correctamente.

A pesar de su apoyo a la filosofía de la Ley de Farmacia de Madrid, el consejero ha reiterado que no está en los planes de Castilla-La Mancha seguir sus pasos. “Tenemos otros proyectos que llevar a cabo. Vamos más por el modelo preventivo”, aseguró. En este caso, por ejemplo, recordó que la región está trabajando mucho con las farmacias en la mejora de la adherencia a los tratamientos, tanto desde las farmacias centinela hasta proyectos más centrados en pacientes crónicos. La Consejería quiere ahondar en este camino, también con los médicos y las enfermeras, para lo cual ahondará en la estrategia de Atención Primaria.

CAR-T

Preguntado sobre las terapias CAR-T, el consejero negó que puedan llegar a ser una “fuente de futuras desigualdades” dentro del SNS. “Las comunidades autónomas nos ocuparemos de que así sea”, añadió. A juicio de Fernández Sanz, la medicina personalizada de precisión “ha venido para quedarse” y para hacer “una mejor salud”, el SNS está en vías de hacerlo y se solucionará de manera satisfactoria. “Lo que hay que hacer es hablar mucho con la industria, para que nos ayuden y no pase lo que ocurra con la hepatitis C”, añadió.

Ello implica, dijo, que el abordaje tenga que ser “en su conjunto, de todo el Estado”. Las perspectivas son halagüeñas, a su juicio, a tenor de lo ocurrido en el Consejo Interterritorial celebrado hace unos días, en el que Castilla-La Mancha pudo comprobar que todas las consejerías buscan lo mismo. Eso sí, reconoció que “quien hoy dispone de profesionales, tecnología y todo lo necesario para llevar a cabo este tipo de terapias son los grandes centros”, que son los que piden estar bien financiados. “Los que no tenemos esos CSUR pedimos un buen mapa, para poder enviar a los pacientes y que no constituya un problema”, añadió.

Por todo ello, Castilla-La Mancha cree que no deberían producirse barreras para los pacientes. “No digo que no las encontremos. Lo ideal es que tengamos un plan perfecto; a eso es a lo que tenemos que aspirar. Habiendo una buena financiación, y con los buenos profesionales que tenemos, no creo que vayamos a abundar en el desequilibrio. Es más, no nos lo debemos permitir”, concluyó.