Una de las características de los test de antígenos en la detección de casos positivos es que combinan rapidez (en la obtención de resultados, con apenas 15 minutos de espera) con seguridad (presentan una sensibilidad superior al 90 por ciento próxima a las de las PCR).
Estos test son un ejemplo, por tanto, de que rapidez y seguridad no son incompatibles y pueden combinarse. Justo lo contrario que el parecer que tiene el Ministerio de Sanidad a la hora de valorar el plan presentado por la Comunidad hace ya más de dos semanas para poder realizar este mismo tipo de pruebas diagnósticas en farmacias dentro de cribados comunitarios, de cara a su estudio y validación. “Procederemos (responderemos) con seguridad, no con prisas”, indicaba el propio ministro de Sanidad en su más reciente respuesta (al cumplirse 12 días de la propuesta) al ser cuestionado por los medios por los plazos.
Días antes, el Gobierno madrileño insistía en reclamar una pronta respuesta. Basta recordar el elocuente mensaje de su viceconsejero de Salud Pública, Antonio Zapatero: “Estamos perdiendo el tiempo; nos urge una respuesta”.
Madrid pide celeridad en la respuesta a su plan para hacer test de antígenos en farmacias y el Ministerio apuesta por la calma. Pero la realidad es que han pasado ya dos semanas
En esta suerte de ten con ten —con una pandemia mediante que exige acciones, no conviene obviar—, si desde el Gobierno de Madrid se pide acelerar, el Ministerio opta por el ralentí. Si desde la Puerta del Sol se insiste en la urgencia, en el Paseo del Prado se alude a la seguridad. ¿Y si todo ello es compatible y no excluyente?
Hay otro detalle que conviene apuntar: las reticencias del ministro de Sanidad a adentrarse o dar amplias explicaciones cuando se le cuestiona por el plan de Madrid en torno a los test de antígenos en farmacias. Illa, quien domina la oratoria, suele apostar por ofrecer amplias y detalladas argumentaciones en sus comparecencias públicas (el análisis de las mismas es subjetivo).
Sin embargo, cuando se le cuestiona por esta posibilidad, apenas dedica unos segundos en la valoración. ¿Nada nuevo que aportar a lo ya dicho? ¿O patada a seguir? ¿O un síntoma preludio de la futura respuesta?
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