La posible realización de los test de antígenos en las farmacias se está convirtiendo en una especie de viaje largo de familia donde el “¿falta mucho? o el ¿ya?” se repite sin final hasta llegar al destino. Los farmacéuticos están preparados. Los profesionales llevan meses preparándose y formándose para poder realizar pruebas en sus boticas con total seguridad, avanzando así en la estrategia diagnóstica del país. Su principal sociedad científica SEFAC inició en mayo un curso específico en realización e interpretación de pruebas diagnósticas de SARS-Cov-2. Una actividad a la que ya se han apuntado más de 4.200 farmacéuticos y farmacéuticas de toda España. También los Colegios Oficiales de Farmacéuticos regionales, como el de Madrid, trabajan para certificar los establecimientos seguros y para que sus colegiados tengan la formación específica para la realización de estas pruebas.
La farmacia está preparada y formada para realizar test de antígenos. Entonces, ¿a qué esperamos para avanzar en la estrategia diagnóstica frente a la COVID-19?
Por tanto, todo está listo a falta simplemente de que el Ministerio de Sanidad dé luz verde al plan presentado por la Comunidad de Madrid para la realización de test de antígenos en las boticas. El documento remitido a Sanidad recoge los requisitos, tanto de espacios, seguridad, formación y gestión de residuos, que deberían asegurar las oficinas de farmacia para poder ofrecer estas pruebas. La realización de los test a base de toma de muestras por hisopo nasal se llevaría a cabo por los propios farmacéuticos, descartando así que fuesen otros sanitarios los que se desplazasen a las boticas. Estas pruebas estarían destinadas exclusivamente a pacientes asintomáticos de las zonas de alta incidencia de COVID-19 donde se pongan en marcha. Además, la participación será voluntaria y requerirá de formación específica.
Todos estos requisitos parecen suficientes para poner en funcionamiento este plan diagnóstico a las boticas. Entonces, ¿a qué espera Sanidad? En tiempos de pandemia cada minuto cuenta, más si cabe cuando nos encontramos a pocos días del inicio de las festividades navideñas, con el aumento de movilidad y reuniones. Desde el inicio de la pandemia las organizaciones internacionales insisten en que la única solución para controlar al virus es ampliando el diagnóstico y asegurando el cumplimiento de las cuarentenas. ¿Realmente podemos permitirnos no implicar a las farmacias ya?
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