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La Comisión de Roncopatía y Trastornos del Sueño de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) ha elaborado este informe sobre los ronquidos en el que se analizan los remedios más utilizados. Según los últimos datos, el 20 por ciento de los varones ronca de forma habitual, frente al 10 por ciento de las mujeres. A día de hoy, existen varios tratamientos para los ronquidos que han resultado ser eficaces, tanto en los casos más leves como en los más graves, como ocurre con la apnea del sueño.
La CPAP suele ser el tratamiento más eficaz para solucionar la apnea obstructiva del sueño, pero en los casos en los que ni este método haya funcionado, la alternativa para que desaparezcan los ronquidos es la cirugía. Existen varias técnicas quirúrgicas que se pueden aplicar para eliminar el problema pero, antes de recurrir a esta solución, el especialista debe realizar una evaluación de la situación para elegir el procedimiento más adecuado. Una de las posibles operaciones es la cirugía nasal, cuyo objetivo es disminuir o mejorar la obstrucción al flujo aéreo causado por alteraciones óseas, como una desviación del tabique nasal; la hipertrofia de cornetes o la presencia de pólipos nasales.
Cuando los ronquidos se producen por algún problema en la zona de la faringe, hay varias opciones quirúrgicas con las que se puede ampliar el espacio nasofaríngeo y orofaríngeo, como se puede determinar en la somnoscopia (DISE). Es el caso, por ejemplo, de la faringoplastia, que mejora el flujo aéreo y el colapso reorientando los pilares anteriores y posteriores faríngeos con extracción de la úvula o campanilla y porción posterior del paladar. Otras cirugías faríngeas son la amigdalectomía o extirpación de las amígdalas, la amigdalotomía o reducción del tamaño de esta masa de tejido o la adenoidectomía o extracción de las adenoides o vegetaciones.
La ablación con radiofrecuencia es otra técnica utilizada para acabar con los ronquidos. Se puede realizar en los cornetes, la base de la lengua y el paladar y su ventaja con respecto a otros métodos reside en su precisión y seguridad, además de que apenas es invasiva y supone un bajo riesgo para el paciente, aunque en ocasiones se necesitan varias sesiones.
Son más difíciles de solucionar los casos en los que la obstrucción se produce en la parte más baja de la faringe, donde deben aplicarse técnicas más complicadas, ya que se trabaja en zonas como la base de la lengua, el hueso hioides o el maxilar. Una de ellas es el avance maxilomandibular. Una alternativa reciente es el implante del nervio hipogloso que permite un tratamiento neuromodulador de la apnea del sueño.
Pero sin duda alguna, la técnica más efectiva para tratar los casos más graves de ronquidos es la traqueotomía, con un cien por cien de curación frente al colapso faríngeo. Sin embargo, por razones anatómicas, sociales y funcionales, este método sólo se aplica bajo indicaciones puntuales como el SAOS muy severo y tras haber fracasado con otros tratamientos médicos y quirúrgicos.
La técnica más efectiva para tratar los casos más graves de ronquidos es la traqueotomía