La deuda de más de 140 millones de euros de Ribera Salud provoca desconfianza en los modelos de colaboración público-privada.
Objetivos inmediatos son evitar un colapso financiero de la farmacia y situarla en la agenda sanitaria.
En este caso han sido las sociedades americana y europea de Oncología Médica, ASCO y ESMO, las encargadas de dar la voz de alarma en un informe que pone en la balanza los precios de los fármacos oncológicos frente a su beneficio.
El reto que va a tener el farmacéutico es conciliar mensajes de Salud Pública con el hecho de que para mantener la salud hay que dar consejos diferentes para cada persona.