A las puertas del fin de ciclo en política sanitaria tras el 23J

El Partido Socialista y el Partido Popular incluyen en sus programas electorales promesas sanitarias ineludibles que iniciarán un nuevo ciclo político en sanidad

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Quien crea que el fin de ciclo de la política sanitaria y farmacéutica al que aludo tiene que ver con la seguridad de un cambio de Gobierno el próximo 23J se equivoca, al menos en una parte. Primero porque las encuestas marcan tendencias y la encuesta final y válida será la del 23J. Y en segundo lugar porque, aunque haya una tendencia marcada por la mayoría de las encuestas hacia una victoria del Partido Popular, se debe poder formar un Gobierno para aplicar el programa electoral. Pero esta duda la resolverán los votantes con toda seguridad en escasos días. Sin embargo, pase lo que pase tras el 23J, la política sanitaria necesitará de reformas con las que están de acuerdo las principales fuerzas políticas y asi lo han manifestado en sus programas electorales.

“lo ajustado de los resultados electorales que se avecinan, las necesidades de pactos y el análisis de las posturas de los distintos partidos indican que no hay otro camino que las reformas”

En materia de sanidad nadie duda de que es precisa una nueva ley de sanidad. Promulgada el 25 de abril de 1986, tras 38 años, bien se merece la sanidad una reforma de calado en su principal Ley. Y en política farmacéutica, existe un acuerdo general de que es precisa una nueva ley del medicamento, como ha dejado claro el Director general de cartera común y Farmacia, César Hernández, y como aseguran desde el Partido Popular.

El anticipo electoral decidido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sólo ha constatado la necesidad de reformas y propuestas sanitarias que figuran en los programas electorales. No hay vuelta a atrás.

Nadie asegura que las promesas electorales se vayan a cumplir, pero lo ajustado de los resultados electorales que se avecinan, las necesidades de pactos y el análisis de las posturas de los distintos partidos indican que no hay otro camino que las reformas en materia sanitaria.

Sí, la sanidad afrontará las reformas necesarias aunque sólo sea porque ya no hay ministros ni ministras que promocionar como candidatos a unas elecciones. El nuevo ministro o ministra deberá centrarse en las tareas sin demora, desde el primer momento.

Las reformas y propuestas sanitarias cuentan, además, con el apoyo de los profesionales y sindicatos, de las sociedades científicas, de las compañías, de las profesiones y de los pacientes.

Listas de espera

Solucionar las listas de espera es un reto para las comunidades autónomas que requiere del apoyo de un Gobierno comprometido. Tanto el Partido Socialista como el Partido VOX lo llevan explícitamente en su programa electoral. Las dos opciones de Gobierno tras el 23J cuentan con cada uno de estos partidos como llave del Gobierno o del acuerdo de programa. Ya sea por acuerdo de coalición, por acuerdo de programa o por decisión del Gobierno que salga de las urnas, el compromiso de algunos asuntos está escrito. Las listas de espera necesitan menos declaraciones y más recursos económicos para su abordaje. Las únicas dos opciones de Gobierno tras el 23J cuentan con las fuerzas políticas que apoyan en sus programas el abordaje de las listas de espera como una prioridad sanitaria.

“Las únicas dos opciones de Gobierno tras el 23J cuentan con las fuerzas que apoyan en sus programas el abordaje de las listas de espera como una prioridad sanitaria”

Un NICE “español”

Uno de los asuntos más solicitados por economistas de la salud, gestores, parlamentarios, compañía y pacientes, es la creacion de un organismos evaluador, un “NICE” español. Se trata de un organismo independiente, que no tenga un sombrero de pagador y el mismo de regulador. Ninguno de los paises de las cinco economías principales de Europa, menos España, carece de este organismo.

Que pueda formular informes objetivos y que no retrase los mismos, al estar dotado de capacidad. Podrá ser la propuesta que se ha hecho del modelo inglés (NICE) pero también sirve el alemán (IQWIG) o el francés (HAS). Sea cual sea la fórmula, se trata de crear una autoridad evaluadora independiente, dotado de recursos y de prestigio. Porque hablamos de solucionar el problema del tiempo excesivo en la aprobación de un medicamento en España. Y es que desde que la EMA (de la que formamos parte en su decisión) da su aprobación, España se demora en proporcionar el precio y la financiación más de 600 días de media, y se sitúa con los países del este de Europa.

Aquí la probabilidad de tener un NICE en España también es casi de certeza en cuanto al compromiso, ya que el Partido Popular y el Partido Socialista apuestan por este nuevo organismo en sus programas electorales.

Más innovación y más rápido

Al Gobierno de España le ha costado en esta legislatura aceptar que España retrasa en exceso la aprobación de nuevos medicamentos. Con la llegada de César Hernández a la dirección general de farmacia, el ministerio de sanidad en palabras de su secretaria de Estado, Silvia Calzón, ya aceptó que el proceso era mejorable. El diagnóstico que ha realizado el actual director de farmacia, y sus intenciones de mejorar los tiempos, van en la línea de identificar los cuellos de botella y transparentar el proceso. Algunos rumores (sólo eso, por cierto) apuntan a que ya se cree desde el propio ministerio que los IPT no hacen sino retrasar la aprobación. No creo que veamos un volantazo de esta magnitud si el Partido Socialista lograra revalidar el Gobierno, pero algunas cuestiones “impensables” se están planteando desde ambos lados de los bloques ideológicos.

Por su lado, el Partido Popular ha encabezado propuestas, declaraciones y una mención clara en su programa electoral a acelerar el proceso de aprobación de nuevos medicamentos. Sociedades científicas, pacientes y 44.000 empleos cualificados de las compañías del sector se unen a la red de investigadores que nos hacen líderes en ensayos clínicos. Todos claman porque se saque España del grupo de países del este europeo, cuyas economías no pueden aprobar los medicamentos innovadores.

“España tiene una posibilidad de reforzar, motivar y consolidar la calidad asistencial en atención primaria a través de los ensayos clínicos”

Atención Primaria

¿Alguien ha oído que algún partido no haya mencionado que la atención primaria debe ser reforzada? Más recursos, más personal para un futuro con carencias de personal y la certeza de que será un cambio que nadie duda en nuestra sanidad. Y con la unanimidad de todos los partidos, veremos una atención primaria mejor dotada. Porque la alternativa es volver a las amenazas de huelga que han sido generales en distintas CC.AA. con todos los Gobiernos. Algo que será una oportunidad, sin duda, será dotar al primer nivel asistencial de la posibilidad de desarrollar la investigación clínica que ya lidera España en nuestros hospitales. España tiene una posibilidad de reforzar, motivar y consolidar la calidad asistencial en atención primaria a través de los ensayos clínicos.

Salud Pública

Todos de acuerdo desde la pandemia en que una Agencia Estatal de Salud Pública era necesaria. El escaso esfurzo del Partido Socialista, que apenas esbozó el nuevo organismo y se ha quedado en el camino de su aprobación, lo ha recogido el Partido Popular con entusiasmo. No sólo lo ha declarado, sino que forma parte de su programa electoral. Lo que es importante es que los expertos y expertas sean de verdad los que asesoren a este organismo, y que los que pensaban en proponer a Fernando Simón se lo quiten de la cabeza, porque se podría producir una auténtica revolución si eso fuera así, en caso de que el Partido Socialista ganara y formara Gobierno tras el 23J.

Salud mental

Entre otros asuntos, la salud mental es una prioridad para todos los partidos sin excepción, ya sea en sus programas o en sus declaraciones y debates. En este caso es más difícil concretar lo que serán capaces de hacer, cuando las CC.AA. están implantando su planes. Un Consejo Interterritorial del SNS más colaborador en este y otros asuntos prioritarios puede facilitar el liderazgo del Gobierno tras el 23J, tarde lo que tarde en formarse, y que algunas propuestas avancen cuanto antes.

“Las urnas recuerdan a los gobernantes que son interinos y que los compromisos hay que cumplirlos”

100 días

No hay duda de que la mejor manera de demostrar compromisos es cumpliéndolos cuanto antes. Tras los primeros 100 días veremos las intenciones de un nuevo Gobierno que deberá contar, más que nunca, con apoyos. Apoyos puntuales o de Gobierno de coalición, pero lo importante es que ningún partido se desdiga de lo que ha prometido. Los partidos tendrán el papel que los electores decidan, y deberán demostrar con claridad que su prioridades tras el 23J serán las mismas en materia sanitaria que las que nos trasladaron durante esta campaña. Las urnas recuerdan a los gobernantes que son interinos y que los compromisos hay que cumplirlos. Esto ayuda mucho, sin duda, a ser optimista y pensar que el nuevo Gobierno, que ejercerá el poder hasta un máximo de 4 años, tendrá la oportunidad de inaugurar un nuevo ciclo político en sanidad con importantes reformas.