Pedro Gullón, director general de salud pública del ministerio de sanidad, ha confirmado que la Agencia Estatal de Salud Pública y la preparación ante futuras pandemias están entre las prioridades del ministerio en materia legislativa. Gullón ha declarado que la agencia no es solo para pandemias, aunque también será su cometido la vigilancia de éstas. El ministerio de sanidad sitúa de esta forma la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública en lo alto de su agenda política.
La idea de la creación de dicha Agencia Estatal fue generada con el acuerdo de los grupos Socialista y Popular en el Congreso en 2021. Las conclusiones de la subcomisión de sanidad constituída por la pandemia, presentó su listado de actuaciones que incluía la creación de la Agencia en junio de 2023, un mes después de la declaración por la OMS del final del estado de alerta decretado en enero de 2020.
Las diversas elecciones celebradas en España y las prioridades han relegado hasta ahora temas que son importantes, no sólo la creación de la agencia sino también un texto normativo de preparación y respuesta ante pandemias.
Vocación de perdurar
La Ley que regulará la Agencia sí deberá pasar más trámites parlamentarios que otros textos legislativos. Eso permitirá que cuente con un sólido apoyo y sea una ley que tenga vocación de perdurar, como ha indicado el propio Pedro Gullón. Esto supone un intenso diálogo con los grupos parlamentarios sobre cómo debe ser la Agencia y sus cometidos, que Gullón ha dejado claro impulsará y es su deseo. No es sólo una agencia de pandemias, pero sí es una agencia que se ocupará de vigilar las pandemias, entre otras cuestiones. También la vacunación, otros asuntos de salud pública o los determinantes sociales de la salud (DSS) estarán en su foco de acción.
Dado el escaso interés de la formación independentista Junts por una Agencia Estatal, es previsible que el Grupo Parlamentario Popular sea uno de los grupos con los que el Gobierno y el ministerio deba dialogar en la búsqueda de escenarios comunes. De hecho, en el proceso de selección de una sede para la Agencia, podría recaer en Andalucía, Aragón o Castilla y León, postuladas para acoger la sede y gobernadas por el PP. El ministerio de Política Territorial decidirá al respecto de la sede.
Trámite
El trámite para la creación y puesta en marcha de la Agencia Estatal de Salud Pública comenzará con la anunciada ponencia en la comisión de sanidad, luego su votación en dicha comisión en pocas semanas (tras sucesivos retrasos en el año), pasando así a otra votación en el pleno del Congreso y su remisión al Senado.
La relevancia del asunto debería permitir el plazo optimista de verano de 2025 que se da Gullón. Debería ser así con la voluntad política de los grupos parlamentarios y la capacidad de diálogo que muestren todos. Es importante contar, sin más demora, con una Agencia Estatal porque las urgencias se acumulan. Organizar y analizar el impacto de los DSS o realizar el oportuno seguimiento «One Health» de la Gripe aviar es relevante a la par que urgente. No hay que olvidar que la pandemia de gripe aviar H5N1 comenzó en 2021 con brotes de aves silvestres y de corral, y afecta a numerosos países en la actualidad. El CDC americano no ve signos claros de remisión en estos momentos.
Plazos
Si todo sigue su curso como debería, tendremos para finales de 2024 la primera votación en el pleno del Congreso. Y si hay acuerdo amplio el Senado no supondrá ningún retraso, ni debería vetar la Ley y alargar dos meses el proceso. Si el Congreso aprueba el texto, es previsible que no sea con los votos de Junts y eso implique el acuerdo del Grupo Parlamentario Popular, lo que debería facilitar su paso por el Senado.
Estatutos
Tras 6 meses tras la aprobación del proyecto de Ley, deberán estar los estatutos de la Agencia aprobados, ya que sin estatutos no podrá funcionar: definir competencias, recursos humanos y condiciones, elección de la sede o dirección de la agencia, asuntos todos que deben obtener un acuerdo parlamentario previo.
Regulación para pandemias
Pero en paralelo una mayor conciencia ante futuras pandemias tiene su parcela de atención por el ministerio de Sanidad. El Senado ha dado muestras de su interés en las pandemias futuras y la preparación necesaria. En abril, un encuentro en el Senado en el que participó el secretario de Estado, Javier Padilla, aclaró su visión y prioridades respecto a futuras pandemias.
El anuncio de esta normativa de «preparación y respuesta ante pandemias» ha sido recordado ahora por Pedro Gullón. Aún sin definir dicho texto, sería un complemento que podrá dotar de la arquitectura necesaria del sistema sanitario para afrontar futuras pandemias. El secretario de Estado ya explicó en el Senado que es preciso concretar la autogestión en casos de emergencias pandémicas como «única opción posible”. También añadió que «dar respuesta a esa capacidad de autogestión es uno de nuestros mandatos”.
Otros temas mencionados por Padilla en su intervención del pasado abril en la Cámara Alta fueron: redefinir competencias profesionales ante las nuevas necesidades, el desarrollo de los sistemas de información sanitaria o la necesidad de un sistema sanitario más robusto, pero también «una sociedad más sana en términos generales y, para eso, son necesarias políticas que actúen por el bienestar de la población«, concluyó Padilla.
Javier Padilla no fue ajeno a la innovación que trajo la respuesta ente la pasada pandemia. Apuntó que tampoco nadie pensaba que un año después de la pandemia se conseguiría tener “varias vacunas efectivas, eficaces y eficientes” y que estas fueran a “abrir una nueva generación de medicamentos y productos sanitarios«.
Sin duda, una nueva regulación que ordene y planifique cómo actuar ante futuras pandemias sería un logro incuestionable atribuible tanto a sus impulsores como a los que lo facilitan priorizando el interés de la sociedad.