Sandra Pulido | martes, 24 de septiembre de 2019 h |

El cáncer de páncreas es una enfermedad con una supervivencia del siete por ciento a los cinco años y del cinco por ciento a 10 años. La principal razón de estas cifras tan desalentadoras es la falta de un diagnóstico precoz de la enfermedad.

Por este motivo, el Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria (Irycis) ha lanzado el proyecto ‘Identificación de población de alto riesgo a desarrollar un cáncer de páncreas, basada en el análisis multiparamétrico de marcadores clínicos, biopsia líquida y técnicas de imagen’.

Esta iniciativa comenzó con tres proyectos consecutivos que consistían en identificar a las familias que tenían agregación de cáncer de páncreas. “Es decir, en familias donde hay más casos de tumor que los habituales”, explica a GM Alfredo Carrato, coordinador del proyecto y director del Irycis.

“Por un lado, estamos haciendo un registro de casos, y por otro, estamos incluyendo a los familiares sanos, que tienen más riesgo de padecer un cáncer de páncreas que la población normal, en un programa de cribado que consiste en una resonancia magnética del páncreas una vez al año y una endoscopia para ver si hay algún nódulo anormal o alguna imagen que pueda ser sospechosa”, destaca el oncólogo. “También hacemos un análisis de sangre para determinar una serie de genes que se alteran con el cáncer de páncreas. Así, mediante ese método, hemos identificado tres tumores de páncreas en personas totalmente asintomáticas que han sido operadas y están curadas de su enfermedad”, añade.

Ahora, quieren extrapolar este programa de cribado a la población en general para poder identificar a la población de alto riesgo. Para ello, van combinar datos clínicos de síntomas sospechosos, alteraciones en técnicas de imagen y alteraciones genéticas en biopsia líquida.

“Vamos a combinar factores clínicos, como puede ser un paciente que desarrolla diabetes con 50 años, técnicas de imagen y datos de biopsia líquida. De ahí saldrá una firma o una serie de características que tendrán la población de alto riesgo. Finalmente, vamos a incluir a esta población de alto riesgo en el mismo programa de cribado que el de los familiares sanos”, resalta Carrato.