Sandra Pulido Madrid | miércoles, 17 de abril de 2019 h |

El 95 por ciento de los casos de cáncer de páncreas fallecen por la enfermedad. Tal y como destaca Alfredo Carrato, coordinador del Simposio, “es ya el tumor más letal”. En contra de lo que venía ocurriendo en el pasado, en el último año han aparecido estudios positivos que están incrementado la supervivencia en los pacientes.

“Los principales avances este año están relacionados con la secuenciación de las diferentes terapias, es decir, añadir segundas y terceras líneas que están produciendo un impacto en la supervivencia de los pacientes. El cáncer de páncreas ya no solo se trata con un fármaco, sino que existen distintas opciones que aumenta la supervivencia de los pacientes”, explica a GM Rafael Álvarez, coordinador asistencial de Oncologia en el HM Norte Sanchinarro.

Enfermedad metastásica

Los oncólogos confían en que los resultados del nuevo estudio de olaparib (Lynparza, AstraZeneca) en enfermedad metastásica traiga datos positivos

“Estamos esperando que nos lleguen los resultados finales del estudio de olaparib en pacientes con cáncer de páncreas BRGA mutado”, continúa Álvarez. “Es la primera vez en la historia de esta enfermedad donde podemos seleccionar los tumores de páncreas por subgrupos. Es decir, hay grupos de pacientes que se pueden tratar de forma diferente con un aumento de la supervivencia con respecto a la población general con cáncer de páncreas”, añade.

Sobre la investigación en esta enfermedad, el oncólogo reconoce que están siendo muy importante los avances actuales. “El hecho de que aparezcan ahora estudios positivos hace que se estimule más para continuar investigando. Hay muchos grupos en España de médicos que están investigando de forma muy importante en páncreas aunque los resultados nunca hayan sido igual de buenos que en otras patologías”, afirma el experto quien expone que “el ejemplo clásico es la inmunoterapia en pulmón con avances muy importantes cuando en páncreas no existen. El cáncer de páncreas siempre ha sido el “patito feo” de la investigación pero no por el número de estudios sino por los resultados obtenidos”, puntualiza.