J. R-T. Madrid | viernes, 01 de junio de 2018 h |

A finales de 2017 el Ilustre Colegio de Médicos de Madrid (Icomem) suscribió un acuerdo de colaboración con BMS Iberia, una parte de BMS Group que se define como un bróker internacional de seguros con sede en Reino Unido y que está especializado, entre otros temas, en el asesoramiento sobre éstos. El contrato firmado pone de relevancia que la ejecutiva de este colegio de médicos, a través de una unidad propia de gestión de riesgos, contrae un acuerdo de colaboración con la filial española de la multinacional británica para que los colegiados suscriban los seguros que consideren a través de su asesoramiento.

Dentro del acuerdo de colaboración el Icomem manifiesta ante BMS Iberia el mercado que tiene a su disposición. “El Icomem cuenta con 44.000 colegiados y 1.000 nuevas incorporaciones cada año, con un perfil muy colaborativo y con un nivel de confianza muy alto en su colegio profesional”, aseveran en el contrato suscrito.

La decisión de la Junta Directiva del Colegio de Médicos de Madrid ha levantado la polémica entre algunos de los compromisarios. Las dudas se sustentan en la legalidad del movimiento realizado por el colegio, al que acusan de monopolizar un mercado y de ejercer una posición que está lejos de sus competencias. Para argumentar sus quejas se basan en una respuesta proporcionada por el Ministerio de Economía, a través de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, en 2009.

En ella, se asevera que un Colegio Profesional no puede ser agente de seguros ni ostentar una participación del 100 por cien en un agente de seguros. “Los colegios no pueden realizar aquellas actividades que no vayan encaminadas a la consecución de esos fines (ordenación del ejercicio de la profesión, la representación exclusiva de la misma y la defensa de los intereses profesionales de los colegiados)”, dice el ministerio. En consecuencia, añade la Dirección General, “la actividad mercantil de agente de seguros así conceptuada legalmente no tiene encaje en las funciones relacionas con los fines esenciales que han de cumplir los colegios profesionales”.

En relación a lo descrito por el Ministerio de Economía, la actuación del Colegio de Madrid se encuentra en la delgada línea que separa la legalidad de la ilegalidad. Al no poder ejercer directamente como agente de seguros se apoya en la actuación de un bróker internacional que, se supone, hará una labor de asesoramiento entre los diferentes seguros existentes en el mercado. La persona que estará al frente de BMS Iberia en Madrid es Fernando Claro, quien ha aterrizado en la compañía tras ocupar diversos cargos de responsabilidad en Marsh España, una correduría de seguros internacional con más de 140 años de historia.