C.M. López Madrid | jueves, 06 de julio de 2017 h |

La infección por el virus de la hepatitis C es uno de los mayores retos de la salud pública mundial. Según los últimos datos de la OMS se estima que 71 millones de personas son portadoras del VHC, de las cuales un gran número de ellas no están diagnosticadas.

En este contexto, España va avanzando con su estrategia nacional, siendo un ejemplo para el resto de países. Lecciones aprendidas han sido muchas. Actualmente, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas trabajan en la actualización de esta estrategia. Con la universalización del tratamiento como bandera, todavía hay que seguir trabajando. Así se ha puesto de manifiesto en la Jornada ‘La Hepatitis C: Un reto mundial’, organizada por Fundamed, con el apoyo de AbbVie, Gilead y MSD.

Los retos en este sentido parecen claros. Haciendo un balance de estos dos años desde la puesta en marcha del Plan Nacional, como ha explicado María Buti, presidenta de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH), no todas las comunidades autónomas han tenido las mismas facilidades para tratar a los pacientes. Con este nuevo escenario, a juicio de los profesionales, ya no hay excusas. En opinión de Agustín Albillos, miembro del Consejo Asesor del Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C, organizaciones como la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (Aehve) están sirviendo como plataformas para denunciar estas inequidades. Javier García-Samaniego, presidente de la Aehve, ha recordado que no es lo mismo eliminar la hepatitis C en una comunidad pequeña que en una grande. En cualquier caso, “hay una universalización del tratamiento y debe haber un acceso en condiciones de equidad”, comenta al experto.

Por otra parte, la colaboración con atención primaria es una tarea en la que hay que incidir, como un eslabón más en la lucha contra la hepatitis C, ya que parece claro que el diagnóstico precoz de los pacientes es el reto más urgente. En este sentido, seguir trabajando para reforzar la continuidad asistencial es definitivo para afrontar la segunda etapa en la lucha contra esta enfermedad.

La clausura del encuentro ha corrido a cargo de Jesús Sánchez Martos, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, quien ha señalado el esfuerzo que ha hecho la Comunidad de Madrid en hepatitis C. “No estamos haciendo otra cosa que nuestra obligación”, ha aclarado. Además, Sánchez Martos ha incidido en la importancia de la prevención en hepatitis C. A su juicio, existe un desconocimiento entre la población en esta materia. “Estamos en el mundo de la comunicación y de la información tecnológica”. En esta esfera, ha hecho un llamamiento a la industria farmacéutica para que conjuntamente se avance en la formación a la población.

En su opinión, hay un antes y un después con el Plan Nacional. “Hay un futuro muy esperanzador”, ha explicado. Ese futuro parte, a su juicio, de la voluntad política que han demostrado las comunidades autónomas, así como de la Ministra de Sanidad, Dolors Montserrat.